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Venezolanos: los nuevos piratas del Caribe

Bandas criminales provenientes de Güiria, estado Sucre, roban y secuestran a pescadores trinitarios

Bandas criminales provenientes de Güiria, estado Sucre, se han convertido en la copia fiel de la piratería somalí africana. Pero mientras que los somalíes se lanzan al mar y someten grandes buques de carga, los piratas venezolanos abordan pequeñas embarcaciones de pescadores solitarios que trabajan costa afuera del mar territorial de Trinidad. Lo que evidencia que las víctimas son personas tan pobres como su propios victimarios.

 

La información aparece destacada en una reciente edición del diario The Telegraph, bajo el título Piratas del Caribe: venezolanos acechan a mar abierto ante el colapso económico

 

“Güiria es hoy un sitio muy malo,” dice José González, un técnico en compuntación que desde hace dos años trabaja en Trinidad. Bajo seudónimo, González explica “es una pena, las privaciones que vive la gente ha cambiado mucho su mentalidad”.

 

Como la más sureña de las islas del Caribe anglosajón, Trinidad yace solo a diez millas de la costa venezolana desde donde los piratas venezolanos actúan con total impunidad, utilizando pueblos pesqueros como Güiria como su base de operaciones.

 

Los piratas utilizan botes de alta velocidad, artillados para someter a sus víctimas a las que roban, secuestran y en algunos casos dan muerte.

 

Güiria se ha convertido en la moderna versión de La Española, la tierra que daba albuergue a los piratas del siglo XVII. Muchos de los maleantes son exempleados de las flotas atuneras que colapsaron luego de la nacionalización de la industria.

 

En villas como Icacos y Cedros, en territorio trinitario, los testimonios están a flor de piel.

 

“Algunas veces solo nos roban, otras llevan a las víctimas a la costa venezolana y piden rescates que van desde 5.000 hasta 33.000 dólares. La gente hace esfuerzos para pagar. Hemos pedido ayuda a los guardacostas pero nada hemos conseguido”, dijo Brian Austin, un pescador de 54 años, que sobrevivió a un robo.