Venezolanos retomaban las calles el sábado para manifestarse a favor y en contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, cuyo gobierno está siendo castigado por nuevas sanciones de Estados Unidos, que busca sacarlo del poder.
Venezuela sufre una hiperinflación, una recesión e interrupciones del suministro eléctrico y de agua, que están provocando protestas en varios lugares.
El líder opositor y jefe del Parlamento, Juan Guaidó, llamó a salir a las calles el sábado en el inicio de una ola de manifestaciones “definitivas” para sacar a Maduro, porque considera que su reelección en mayo del 2018 fue un fraude y es responsable de la grave crisis.
“Ha sido un camino difícil, años de lucha (…) Llegamos aquí gracias a estar en las calles y seguiremos hasta recuperar nuestros derechos”, dijo el viernes por la noche en Twitter Guaidó, considerado por decenas de países de América y Europa como presidente encargado de Venezuela.
En tanto, los jefes del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) convocaron a sus simpatizantes a marchar desde zonas del centro y oeste de Caracas hasta el Palacio de Miraflores.
Maduro, que acusa a Guaidó de ser un “títere” de Estados Unidos, que quiere derrocarlo para apoderarse del petróleo venezolano, se enfrenta a la presión de Washington que el viernes anunció más sanciones contra el sector petrolero, la principal fuente de divisas del país.
El sábado, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) anunció una visita a Venezuela de su presidente, Peter Maurer, del 6 al 10 de abril.
Maurer “conversará con personas necesitadas y con personas afectadas por la violencia armada”, dijo el Comité en un comunicado, en el que expresó su preocupación por “el grave impacto que la situación actual tiene en los venezolanos, sobre todo en quienes carecen de acceso a los servicios básicos”.
Vía: Reuters