Ella anda en una cruzada: quiere que el oficio de modelar gane respeto y prestigio y también quiere que las modelos se preparen mejor. Su inspiración es la canadiense Coco Rocha, a quien llaman la reina de las poses. Tania Mafilito no solo encanta frente a las cámaras sino que comparte lo que sabe a través de la plataforma Model Up Generation
Las fotos en la playa se ven de lo mejor. Sol, arena, mar azul. Parece una canción. Pero las modelos deben estar dispuestas a pasar por ciertas incomodidades: la misma arena por aquí y por allá, la fricción en algunas poses, la piel quemada, la sed. Y nada de eso se debe ver en las fotos. Hay que ser un poco más guerreras y menos divas. Tania Mafilito lo sabe, lo predica y lo hace. Por eso se ve también.
Maracucha, 24 años, Tania ha querido ir más allá de ponerse bella para la cámara. Reivindica el trabajo de modelo como algo serio y con pretensiones de actividad artística. Por eso concibió @ModelUpGeneration, una plataforma de contenidos por redes sociales y cursos y talleres presenciales: “Aquí confunden el modelaje con ser miss o con la prostitución. Basta de eso. El modelaje es arte, es una forma de expresión. Y en el país tenemos una gran carencia de centros de formación en esto, así que Model Up Generation nació con la idea de reforzar la cultura del modelaje real, de servir como herramienta porque aquí no hay muchas opciones para aprender a ser modelo”.
Más allá del talento natural y el físico, hay detalles, cosas que debes aprender: “A través de videos en Instagram comparto información y tips sobre cómo presentarse a un casting, cómo llevar las uñas, qué tipo de ropa usar, si vas a un casting de trajes de baño o desnudos –por ejemplo- no debes llevar ropa que marque la piel para evitar que el fotógrafo tenga que retocar tanto, etcétera”.
A partir de ahí, claro, Tania propone talleres personalizados y grupales. Por ejemplo: en agosto prepara uno con el fotógrafo Rafael Meza sobre un asunto fundamental: ella enseña a posar y él muestra cómo es posible hacer dirección de fotografía sin tocar a la modelo. Un asunto de respeto y profesionalismo. Ahora mismo, el 20 y 21 de julio Tania dictará otro sobre manejo del cuerpo en exteriores: “Trabajar en estudio es cómodo, pero en exteriores puede llegar a ser rudo y uno debe adaptarse, ser paciente. No se puede andar de diva en esos casos. Ese posiblemente será en el casco histórico de Maracaibo, que ofrece muchas posibilidades para fotos, pero es un ambiente rudo y con un calor tremendo en estos días”.
Es mucho lo que hay que aprender: “No basta con ser bonita o bonito. De hecho, no tienes que ser bonita para modelar. Tienes que saber de fotografía, de expresión corporal…”. Y hasta de mover las manos: “Una vez hicimos un taller de retratos centrado en cómo posar con el rostro y las manos. Las manos, aunque no lo creas, son muy importantes. Si no las sabes mover, no modelas bien. En realidad tienes que saber trabajar con todo el cuerpo”.
¿Y dónde aprendió Tania tantas cosas? “Tengo ocho años modelando pero no puedo decir que se lo debo a una academia, aunque sí estuve en una. Lo que pasó fue que todas las fallas que le vi a esa academia me llevaron a buscar información y a hacer Model Up Generation. Mi mayor inspiración ha sido la modelo Coco Rocha, la reina de las poses. Ella hace su propio taller, Coco Rocha Model Camp y tiene un libro que utilizo mucho llamado “Estudio de la pose” que es, ajá, arrechísimo. Uno de mis sueños es ir a un taller con ella… Otra cosa que me ayuda mucho es que ligo esto con la actuación. Posar es actuar. Cada vestuario, cada sesión, cada maquillaje para mí es una película nueva, un personaje nuevo”.
Modelo: Tania Mafilito @instataniam @modelupgeneration
Con información de: El Estimulo