Se cumplieron escasos cinco días desde que se reparó una fuga de gas en la tubería que traslada el producto desde Bajo Grande hasta el Complejo Refinador Paraguaná, cuando los pescadores se percataron de otra el 21 de junio. Esta vez fue un derrame de petróleo, ubicado a un kilómetro de la población de Río Seco, en el occidente del estado Falcón.
Desde entonces informaron a los representantes de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), quienes se apersonaron para hacer la inspección aérea, el miércoles 22 de junio, y constataron que la fuga de petróleo afecta a todo el eje costero de Río Seco y Zazárida.
Ese mismo día comenzaron las coordinaciones para frenar la fuga, con el apoyo de dos buzos del estado Zulia y pescadores de Punta Cardón. Desde hace dos años, cuando empezaron los derrames de crudo y gas en esas tuberías, ellos son los encargados de poner grapas hasta que la fuga se detenga.
Los pescadores de Río Seco informaron a El Pitazo que sostuvieron una reunión con miembros de Pdvsa Occidente, la mañana del miércoles 22 de junio, en la ciudad de Coro, capital del estado Falcón. Les exigieron una indemnización para los pescadores de todo el eje costero de la región, además, que se hagan responsables del daño ambiental por los constantes derrames de crudo y gas de las tuberías del proyecto de suministro Zulia-Falcón (Sufaz), que incluye redes submarinas que atraviesan el golfete de Coro, para llevar crudo y gas desde Bajo Grande en Zulia hasta el Complejo Refinador de Paraguaná (CRP).
¿Indemnización por los derrames?
Los pescadores aseguraron que Pdvsa tiene intenciones de indemnizarlos, pero se deben cumplir con varios parámetros de los cuales no ofrecieron detalles. Asimismo, se comprometieron a aumentar el doble de la asignación de litro de gasolina por embarcación para hacer la faena más lejos y así garantizar el trabajo. También informaron que se suspendió el suministro de crudo desde Bajo Grande hasta que se repare la tubería.
Se pudo conocer que los trabajos de reparación ya arrancaron. Sin embargo, los antecedentes de los 11 derrames que se han registrado en la zona en los últimos dos años, indica que el trabajo puede durar hasta 15 días, todo depende de las condiciones climáticas y el área afectada, lo que incide en el suministro de crudo a las dos refinerías (Amuay y Cardón).
Según los trabajadores petroleros, esas tuberías no reciben el mantenimiento adecuado desde hace más de 15 años, cuando se les introducía una cámara que recorría toda el área y exponía las zonas que estaban en riesgo para ser reparadas antes de que se diera una fuga. Además datan de muchos años, ya cumplieron su vida útil y como no se les hizo el mantenimiento preventivo estas son las consecuencias.
Estos derrames han afectado la pesca artesanal y la biodiversidad marina de todo el eje costero de Falcón. Según los pescadores, ahora deben ir más lejos para tener algo de pesca, pues en las áreas cercanas a las refinerías y las tuberías ya todo está contaminado y no hay especies.
Con información de El Pitazo