En otro procedimiento, el Cicpc capturó a acusado de captar jóvenes para prostituirlas
El Tribunal Único de Juicio en Materia de Delitos de Violencia Contra la Mujer de La Guaira condenó a Enrique José Ramírez Díaz, a cumplir 30 años de prisión por cometer abusos contra sus dos hijastros, según expediente WP01-S-2019-000576.
Ramírez Díaz fue detenido en Tanaguarena (La Guaira) a comienzos de este año luego de ser denunciado. En razón de ello, la Fiscalía 8ª del Ministerio Público le imputó abuso sexual a niña (8 años) y niño (5 años) con penetración, en grado de continuidad.
El juicio contra Ramírez Díaz comenzó el 12 de Mayo de este año y culminó el Martes pasado en el Palacio de Justicia de La Guaira.
En otro procedimiento, el Cicpc capturó a Víctor Johnpierr Medina Aldas (31), acusado de “drogar, abusar sexualmente y prostituir jóvenes entre 15 y 17 años”, según el reporte de la policía científica.
Los funcionarios dieron con el sujeto mediante la entrevista a víctimas y seguimiento a sus redes sociales. Los agentes detectaron que Medina Aldas captaba a jóvenes ofreciéndoles trabajos remunerados en dólares. Pero posteriormente le decía a las jóvenes que se trataba de un trabajo sexual. Y si acaso se negaban, el sujeto las drogaba para entregarlas a hombres que previamente habían pagado por citas íntimas, según lo narrado por el Cicpc.
Medina Aldas fue detenido en la sede de la policía científica ubicada en la avenida Urdaneta, Caracas. Allí le incautaron tres celulares que, al ser vaciados, detectaron la existencia de 10 víctimas.
El detenido fue entregado a la Fiscalía 100º del Ministerio Público de Caracas.
Un modus operandi similar empleaban Alexis José Toledo Vivas (53) y Francisco Casas Miranda (51), quienes fueron capturados en el sector Garrochal, San Antonio del Táchira.
Estas personas formaban parte de una red que captaba a jóvenes a través de redes sociales para ofrecerles trabajo como comerciantes. Pero al acudir al sitio, eran explotadas sexualmente en Colombia, informó el Cicpc.
Una mujer de nombre Wirianyi era la encargada de captar a las muchachas; mientras que Marcos Acosta realizaba los financiamientos para cubrir el viaje de las víctimas.
En medio de la detención de Toledo y Casas, los agentes del Cicpc rescataron en Peracal (Táchira) a dos muchachas que estaban ya listas para ser enviadas a Colombia bajo ese esquema de prostitución.
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