El Gobierno venezolano estima que los ingresos por exportaciones de crudo financiarán 63 por ciento del presupuesto nacional de 2023, según un documento visto por Reuters, en momentos que la producción petrolera sigue estancada y se revisan parcialmente algunas sanciones estadounidenses.
La administración de Nicolás Maduro proyecta que el gasto del próximo año será equivalente a 14 mil 715 millones de dólares, de acuerdo con el tipo de cambio que calcula el emisor venezolano de 11,6 bolívares. El presupuesto sube 8,5 por ciento respecto a 2022 cuando se contempló en 13 mil 560 millones de dólares.
Según el proyecto de ley de presupuesto de 2023, los ingresos que asignará la estatal petrolera PDVSA al Fisco nacional para salud, educación, remuneraciones, entre otros, serán equivalentes a nueve mil 341 millones, un monto que supera en 14 por ciento a los aportes previstos para 2022, que ascendieron a ocho mil 200 millones de dólares.
El proyecto de ley de presupuesto de 2023 no menciona el precio del crudo ni la producción promedio como solía hacerse hasta hace seis años.
El flujo de ingresos petroleros ha estado golpeado por la menor producción, cuya capacidad ha estado afectada por los años de desinversión, mala gestión y las sanciones de Washington impuestas en 2019. Este año, la producción de crudo ha estado oscilando entre los 600 mil y 700 mil barriles por día (bpd), según datos de la Opep, lejos de la meta anunciada por las autoridades de un millón de bpd.
Con información de Reuters
