El bolívar venezolano registró en esta última semana una devaluación de 17 % frente al dólar, cuyo precio se ha incrementado de manera acelerada tanto en el mercado oficial como en el paralelo, donde superó este viernes los 14 y 18 bolívares, respectivamente.
En siete días, el precio de la divisa en el mercado oficial aumentó un 20 %, al subir de 11,69 bolívares a 14,12 bolívares, según los reportes del Banco Central (BCV), que informa a diario de la cotización promedio que resulta en las operaciones de las mesas de cambio de las instituciones bancarias.
En el mercado paralelo, por otra parte, el incremento en el precio de la moneda estadounidense, usada en la mayoría de las transacciones comerciales en el país, ha sido mayor, al dispararse de 13,78 bolívares a 18,26 bolívares, un alza del 32 % en una semana, según el portal Monitor Dólar Venezuela, que ofrece la cotización diaria teniendo en cuenta varios marcadores.
Así, el bolívar se devaluó un 24 % frente al dólar cotizado en el mercado no oficial.
Los salarios y las pensiones
El salario mínimo y las pensiones, fijados en 130 bolívares en marzo pasado, han perdido desde entonces el 69 % de su valor, como resultado de la devaluación del bolívar.
Estos ingresos, al cambio oficial, pasaron de 29,68 dólares a 9,20 dólares, con lo que el salario y las pensiones se hunden aún más, por debajo del umbral de pobreza extrema por rango de ingresos que establece el Banco Mundial, de 1,90 dólares al día, al ser de 0,30 dólares diarios.
El economista venezolano y profesor asociado de la IE University en Madrid José Manuel Puente dijo a EFE que el empobrecimiento del país caribeño “ha sido abrumador, consecuencia del muy mal manejo de política económica del Gobierno”, incluso en medio de un aumento de los precios del petróleo.
“Venezuela está en medio de un boom petrolero, consecuencia de la guerra Rusia-Ucrania, en el que los precios del petróleo venezolano, que llegaron a los 92 dólares, hoy están en el orden de los 70 dólares, pero todavía sigue siendo un precio extraordinario como para que Venezuela esté viviendo estos terribles desequilibrios cambiarios con terribles impactos sobre el salario”, explicó.
La estrategia
La dictadura madurista ha venido aplicando una estrategia para contener el tipo de cambio que consiste en controlar la demanda de dólares, disminuyendo la emisión de bolívares -necesarios para comprar divisas- a través de la reducción del gasto público y la restricción de la financiación.
Sin embargo, en los últimos meses, el régimen venezolano incrementó el gasto con varios pagos a los trabajadores públicos, al tiempo que ha venido liberando los créditos, que aumentaron un 123 % en el último año.
Por su parte, el economista y profesor universitario Ronald Balza Guanipa dijo a EFE que el Banco Central ha aumentado “la emisión de bolívares para el gasto del Gobierno” en “actividades que está llevando a cabo en este momento” que se desconocen, además del pago de bonificaciones navideñas a los empleados del sector público.
Al mismo tiempo, señaló que el BCV también ha reducido la venta de divisas con la que venía alimentando la oferta para contener el tipo de cambio.
Sin embargo, según Balza Guanipa, es difícil conocer cuál es la oferta de divisas debido a que no se conoce cuántos dólares circulan ni cuántos ingresan a la nación por la venta de petróleo y otras exportaciones por la falta de data oficial.
Con información de EFE