La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió investigar “a fondo” el incendio en un centro de detención de México donde murieron al menos 39 migrantes de Centroamérica y Sudamérica y más de 20 resultaron heridos de gravedad.
António Guterres, secretario general de la ONU, expresó “gran consternación” por el hecho que ocurrió el lunes en la noche en un centro del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez Juárez, Chihuahua, en la frontera entre México y Estados Unidos.
Guterres instó a las autoridades mexicanas a emprender una “investigación a fondo, exhaustiva de la tragedia” y reiteró su compromiso por seguir trabajando con los gobiernos de los países que tienen migración para establecer vías de inmigración “más seguras, reguladas y organizadas”.
Los reportes preliminares indican que los migrantes procedían de Centroamérica, especialmente de Guatemala, así como de Venezuela y Colombia, entre otros países de América Latina, dijo la ONU.
La mayoría de los migrantes muertos hasta el momento son de Guatemala. También hay venezolanos fallecidos.
El organismo internacional detalló que entre los fallecidos se encontraban algunas personas que esperaban solicitar asilo en Estados Unidos.
Según la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en México, había 68 personas extranjeras en el centro migratorio en el momento en que se produjo el incendio.
El incendio presuntamente fue provocado por algunos migrantes en protesta por supuestamente enterarse de que serían deportados, quienes habrían prendido fuego a colchonetas.
Un video de seguridad divulgado por medios mexicanos el martes muestra a unos migrantes colocando colchonetas de espuma contra las barras de la celda y prendiéndoles fuego.
La cifra de muertos subió el miércoles, el número inicial era 38 fallecidos.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU en México sumó su voz a la de Guterres para pedir que se realice “una investigación exhaustiva que deduzca responsabilidades en el suceso”.
El Comisionado del INM, Francisco Garduño Yánez, sostuvo una reunión el miércoles con la Fiscal General de Chihuahua, Ernesto Badillo Aguilar, y dijo estar dispuesto a aportar las pruebas necesarias para “deslindar responsabilidades por la conflagración”.
“Proporcionaremos el plano de la estación migratoria, el organigrama de personal a fin de que ustedes inicien los citatorios que se requieran. Estamos abiertos a ello. Toda prueba documental o circunstancial, testimonial, pericial”, sostuvo.
Badillo Aguilar explicó que en las instalaciones del INM en Ciudad Juárez ya se encuentran peritos de la Ciudad de México que trabajan en el levantamiento de pruebas.
“Estamos trabajando y esperamos tener integrada la carpeta a la brevedad posible; se darán a conocer los dictámenes para que podamos ir deslindando responsabilidades en caso de que las hubiera”, indicó.
Con información de Cactus24