En el marco del Día del Trabajador, el presidente Nicolás Maduro anunció una serie de medidas para intentar aplacar las críticas sobre la política salarial que ha impuesto el gobierno venezolano. Una de estas medidas fue “indexar” el cestaticket al equivalente de unos 40 dólares y aumentar el “bono de guerra económica” para los suscritos al “Carnet de la Patria”.
Sin embargo, estas medidas han generado opiniones encontradas entre los ciudadanos y expertos económicos.
El anuncio de Nicolás Maduro sobre la “indexación” del cestaticket ha generado muchas críticas debido a que no se ha advertido el salario mínimo.
El cestaticket es un beneficio que reciben los trabajadores venezolanos en forma de tickets de alimentación y que se entregan mensualmente, pero no está incluido en el salario mínimo. Al “indexarlo” al equivalente de 40 dólares, el gobierno busca proteger a los trabajadores de la inflación, pero algunos expertos afirman que esto no es suficiente y que es necesario un aumento real del salario mínimo.
Además, Maduro aumentó el “bono de guerra económica” para los suscritos al “Carnet de la Patria”, que según unos analístas políticos, es una tarjeta de control social utilizada por el gobierno para chantajear a la población. Sin embargo, este incremento también será “indexado” y estará sujeto a la fluctuación de la tasa de cambio oficial, lo que puede afectar negativamente su valor real.
Las medidas anunciadas por Nicolás Maduro en el Día del Trabajador han generado opiniones encontradas. Si bien “indexar” el cestaticket al dólar puede proteger a los trabajadores de la inflación, muchos afirman que es necesario un aumento real del salario mínimo.
Además, el aumento del “bono de guerra económica” ha generado desconfianza entre los ciudadanos, quienes consideran que esto solo es un intento del gobierno de silenciar las críticas. En definitiva, estas medidas no parecen ser la solución a largo plazo para la crisis económica que enfrenta Venezuela.