El Tribunal 4º de Juicio del estado Aragua condenó a Karelys Grymayry Arcila Montilla, madre de un bebé de un año que fue asesinado en la cárcel de Tocorón, a 19 años y 8 meses de prisión por su responsabilidad en el crimen. La mujer se encontraba visitando a su pareja, quien estaba recluido en el centro penitenciario por el delito de robo agravado, cuando ocurrió el hecho.
La mujer salió a comprar en una bodega dentro de la cárcel y al regresar encontró a su hijo con una lesión en el ojo y sin signos vitales. El bebé murió a causa de una hemorragia por traumatismo cráneoencefálico y las investigaciones determinaron que la madre era responsable del crimen.
Según la ONG Una Ventana a la Libertad, la mujer fue amenazada por su pareja para que no lo acusara, pero un compañero de celda se percató de lo ocurrido y provocó la muerte del hombre por presuntamente violar y golpear al bebé.
La condena de Karelys Grymayry Arcila Montilla por la muerte de su hijo en Tocorón es un caso trágico y doloroso que nos recuerda la importancia de proteger a los más vulnerables. Este hecho debe ser una llamada de atención para que las autoridades penitenciarias implementen medidas para garantizar la seguridad de los niños y niñas que se encuentran en las cárceles con sus padres.
Además, es importante destacar que la violencia contra los niños y niñas es inaceptable y debe ser condenada enérgicamente por toda la sociedad.
