La frontera entre Colombia y Panamá, marcada por la imponente selva del Darién, es conocida por ser uno de los pasos más peligrosos para migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
En los primeros cuatro meses del año, la cifra de migrantes que han logrado cruzar esta región ha alcanzado de manera exponencial, alcanzando un número alarmante que pone en evidencia la magnitud de la crisis migratoria.
Según datos oficiales a los que tuvieron acceso a la agencia EFE, más de 127 mil migrantes irregulares han logrado llegar a Panamá tras cruzar la jungla del Darién en lo que va del año, cifra seis veces mayor a la registrada en el mismo lapso de 2022.
Los migrantes reciben asistencia sanitaria y alimentaria estaciones ubicadas en las provincias de Darién y Chiriquí, en las que colaboran diversos organismos internacionales. La nacionalidad venezolana es la más numerosa, seguida por Haití, Ecuador, Colombia e India.
La situación migratoria en la región es cada vez más compleja y requiere de un enfoque integral que incluye medidas humanitarias y de protección a los derechos de los migrantes.
El aumento en la cifra de migrantes que cruzan el Darién es alarmante y pone de manifiesto la necesidad de que los gobiernos de la región trabajen de manera coordinada para abordar esta crisis.