La adquisición de cédulas venezolanas falsas por parte de delincuentes colombianos se ha convertido en un problema en Bucaramanga, Colombia.
Este sería un negocio que se está promocionando por avisos clasificados de Internet, argumenta el concejal Jaime Andrés Beltrán, los cuáles están trayendo grandes consecuencias ya que muchos delincuentes colombianos buscan obtener estos documentos para poder cometer sus fechorías violentando de esa forma la seguridad y el sistema judicial.
La compra de cédulas venezolanas falsas por parte de delincuentes colombianos se esta convirtiendo en un fenómeno que en un principio estaba dejando mal a la población venezolana, pero gracias a este hallazgo en Bucaramanga, Colombia, ha comenzado a analizar cuáles son las implicaciones legales ante la seguridad de los venezolanos ante el sistema judicial.
El negocio de las cédulas falsas
Según la investigación del concejal Jaime Andrés Beltrán, los delincuentes colombianos que se hacían pasar como ciudadanos venezolanos, en los últimos meses han estado comprando cédulas falsas venezolanas a través de anuncios clasificados por Internet, documentos que les permiten evadir las autoridades y hacerse pasar por ciudadanos venezolanos, para de esa forma cometer delitos en colombia, como en cualquier otra parte del mundo donde se están movilizando estos delincuentes
Además la impunidad y reincidencia delictiva, lo convierte en un creciente problema ya que, una vez son capturados, estos delincuentes son presentados ante un juez como ciudadanos venezolanos y en muchos casos, son dejados en libertad, según la naturaleza de sus delitos, por tratarse de crímenes menores, que no ameritan su aprehensión.
Por otro lado, algunos de estos delincuentes son deportados a Venezuela, donde son liberados, después de que verifican en la base datos para ver si tienen delitos en venezuela y como no encuentran antecedentes, haciendo que estos individuos regresen nuevamente a Bucaramanga Colombia, donde nuevamente vuelven a cometer delitos utilizando las mismas cédulas falsas.
La utilización de cédulas venezolanas falsas por parte de delincuentes colombianos plantea serias implicaciones para la seguridad y el sistema judicial. Por un lado, se dificulta la identificación y persecución de los verdaderos responsables de los delitos, generando una impunidad con la que son tratados una vez.
En fin la venta de cédulas venezolanas falsas a delincuentes colombianos en Bucaramanga es un problema que pone en riesgo la seguridad de la nación así como de los venezolanos, que en la mayoría de los casos termina pagando ellos a causa del descrédito ocasionado por delincuentes colombianos, dejando mal parado el sistema judicial, de colombia.
Lo cual es crucial y necesario que las autoridades tanto de Colombia como de Venezuela tomen medidas efectivas para combatir este fenómeno, donde puedan fortalecer la cooperación entre ambas naciones que busquen garantizar la integridad del sistema de identificación y registro.
También las instituciones encargadas de la seguridad y la migración, puedan implementar mecanismos más rigurosos de verificación de identidad, para de esa forma verificar que las personas que presenten sus documentos de identidad no haya ningún tipo de problema.
Además, es fundamental realizar una campaña sobre este tema a la población sobre este problema y fomentar una mayor colaboración ciudadana para denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con la adquisición y uso de documentos falsos.
