En un impresionante esfuerzo de cooperación entre el CICPC y Polirosario, una niña de cinco años que había sido secuestrada por su padrastro logró ser rescatada. Este emotivo rescate se llevó a cabo en una operación conjunta que culminó con éxito, devolviendo la esperanza a la víctima y su familia.
La niña fue secuestrada en el sector Sibucara, parroquia Ricaurte, por su padrastro, identificado como Alejandro Enrique Uriana, el pasado domingo por la noche. El Cicpc, a través de su Delegación Municipal El Moján, se unió a Polirosario en una operación decidida para encontrar y liberar a la menor.
En una muestra de colaboración y cooperación entre fuerzas de seguridad, los detectives del Cicpc solicitaron la ayuda de Polirosario para abordar el caso. El director de Polirosario, comisario Edwin Cárdenas, se sumó a la operación al reconocer al presunto secuestrador, quien ya estaba bajo custodia por otro delito.
Las pesquisas y la información proporcionada por el propio Uriana llevaron a la ubicación de la niña en La Invasión, en las inmediaciones del sector Los Prado de La Villa del Rosario. La pequeña fue encontrada en un estado preocupante de desnutrición dentro de un rancho. Tras ser rescatada, fue llevada a la medicatura forense para evaluar su estado de salud.
La madre de la niña, Yaritza González González, había denunciado el secuestro ante el Cicpc el mismo día del incidente. Ella relató que el padrastro había llegado a su hogar de manera agresiva, exigiendo que ella se fuera con él. Al negarse, tomó a la niña y huyó con rumbo desconocido.
Este emotivo rescate subraya la importancia de la colaboración entre diferentes agencias de seguridad para garantizar la pronta liberación de las víctimas y llevar a los responsables ante la justicia. Además, es esencial que la sociedad esté alerta y reporte cualquier actividad sospechosa para prevenir incidentes de este tipo. La cooperación y el rápido accionar son claves para mantener a salvo a los más vulnerables.
