Humberto Prado, coordinador del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), ha hecho impactantes revelaciones sobre las condiciones en la cárcel de Tocorón, señalando la complicidad de las autoridades penitenciarias en la creación de lujosas instalaciones en la prisión.
Responsabilidad Compartida de las Autoridades Penitenciarias
En una entrevista con el programa Háblame Bajito de Radio Fe y Alegría Noticias, Prado destacó que en las cárceles venezolanas existen dos tipos de autoridades responsables: la Guardia Nacional, dependiente del Ministerio de la Defensa, y la custodia interna, bajo el Ministerio de Asuntos Penitenciarios. Esto implica que cualquier elemento que ingrese a la prisión debe contar con el permiso de la Guardia Nacional.
Calificativo de “Ineptitud Total y Complicidad”
Prado no escatimó en calificar la situación en Tocorón como una “ineptitud total y complicidad” por parte de las autoridades, especialmente en el contexto de la fuga de Héctor Guerrero Flores, alias el “Niño Guerrero”, líder de la megabanda criminal el Tren de Aragua, cuyo paradero aún es desconocido.
Denuncias de Abusos y Violencia
El OVP ha recibido informes de familiares de reclusos que hablan de heridos, torturados y ejecutados por parte de los funcionarios. Continúan investigando en las distintas morgues para determinar el destino de los presuntos asesinados.
Sembranato en las Cárceles Venezolanas
Prado recordó que en 2011, el entonces presidente Hugo Chávez creó el Ministerio de Asuntos Penitenciarios y nombró a Iris Varela como ministra. A pesar de las esperanzas iniciales de que esta figura ministerial tomaría medidas para abordar los problemas en las cárceles, Prado señaló que lo que ocurrió fue la expansión de bandas criminales como el Tren de Aragua a nivel nacional e internacional.
Necesidad de Cumplir con Estándares Internacionales
El coordinador del OVP concluyó enfatizando que las autoridades deben cumplir con estándares y manuales internacionales que exigen un funcionario de seguridad por cada 10 reclusos, además de equipos técnicos para atender todas las áreas necesarias para la rehabilitación y reinserción social de los internos, como las áreas social, legal, deportiva, educativa y religiosa.