En una operación coordinada, la Brigada de Respuesta Inmediata Motorizada (BRIEM) ha logrado detener a un individuo depravado en Catia La Mar, identificado como Javier Oswaldo Rangel López, quien se dedicaba a captar a menores de edad para filmar videos sexuales que posteriormente comercializaba a 200 dólares cada uno.
- Arresto en Catia La Mar: El arresto de Javier Oswaldo Rangel López tuvo lugar en las cercanías del terminal de pasajeros de Catia La Mar, tras la denuncia de los padres de dos adolescentes. Este individuo, de 35 años, se dedicaba a captar a menores para grabar contenido sexual.
- Operación de Inteligencia Exitosa: Funcionarios de la BRIEM llevaron a cabo una operación de inteligencia que permitió la detención de Rangel. Durante el arresto, se encontraron pruebas contundentes, como un teléfono celular con un video sexual grabado por el delincuente, así como ropa interior femenina y juguetes sexuales.
- Modus Operandi del Delincuente: La investigación reveló que Rangel operaba en el sector de Mamo, municipio Vargas, donde filmaba a menores en actos sexuales a cambio de dinero. Además, se acercaba a liceos locales, como Fernando Toro y Evelia Avilán Pimentel, para captar a sus víctimas.
- Comercialización de Contenido Íntimo: Una vez obtenidos los videos, Rangel los comercializaba a través de redes sociales y páginas web por 200 dólares cada uno, explotando la vulnerabilidad de las víctimas.
- Privativa de Libertad por Tres Delitos: Rangel enfrenta ahora cargos graves, siendo presentado ante el Tribunal Segundo de Control en materia de Violencia de Género. La privativa de libertad fue dictada por prostitución forzada, exhibición pornográfica y explotación sexual.
- Arresto y Residencia en El Dorado: Tras el proceso legal, Rangel está bajo arresto en el Centro Penitenciario de El Dorado, enfrentando las consecuencias de sus acciones.
- Continuación de la Investigación: Los efectivos policiales siguen investigando el caso con el objetivo de localizar a más víctimas, con el propósito de llevar a cabo una justicia completa y exhaustiva.
Este caso aterrador destaca la necesidad apremiante de proteger a los menores de las amenazas cibernéticas y los depredadores sexuales. La detención de Rangel es un paso hacia la justicia, pero también es un recordatorio de la importancia de la vigilancia y la denuncia ciudadana para erradicar estos crímenes aberrantes. La sociedad debe permanecer alerta y unida para salvaguardar la inocencia de quienes son más vulnerables.
