En un giro desgarrador de los eventos, María Gabriela Delgado, de 39 años, enfrenta la privación de libertad por su presunta implicación en el abuso sexual de su propia hija, Emily Gabriela Durán Delgado, de 15 años. Este luctuoso incidente, descubierto el 27 de octubre de 2023 en la urbanización Don Rómulo Betancourt, parroquia Mercedes Díaz, municipio Valera, estado Trujillo, revela una trama de dolor y negligencia.
Un Oscuro Secreto Familiar:
La oscura realidad comenzó a emerger cuando los médicos del hospital Dr. Pedro Emilio Carrillo notificaron al Ministerio Público tras recibir a Emily, encontrada por su madre colgada de un mecate en su habitación. Las pesquisas revelaron que la joven, durante dos años, sufrió abusos sexuales perpetrados por su padrastro, José Luis Rojo Gutiérrez, de 39 años.
El Silencio Cómplice de una Madre:
Lo más desgarrador de la historia es que la progenitora, María Gabriela Delgado, no solo estaba al tanto de los abusos, sino que nunca alertó a las autoridades sobre la perversidad que su hija enfrentaba a diario. En la audiencia de presentación, Delgado fue imputada por el delito de abuso sexual a adolescente con penetración continuada en comisión por omisión, según la Ley Orgánica de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
El Rol del Padrastro:
José Luis Rojo Gutiérrez, también imputado, emerge como una figura sombría en este drama. Su presunta participación en el abuso sexual de Emily pone de manifiesto la falta de escrúpulos y empatía, marcando una mancha indeleble en la vida de la joven que, finalmente, eligió la liberación a través de la trágica decisión de quitarse la vida.
El caso de Emily revela la oscura realidad que puede acechar detrás de las puertas de cualquier hogar. La negligencia de una madre y la crueldad de un padrastro dejaron cicatrices imborrables en la vida de una adolescente inocente. Este desgarrador episodio destaca la importancia de la denuncia y la protección de los más vulnerables.