Este jueves 14 de marzo, a las 11:36 a.m., diversos estados de Venezuela fueron sacudidos por una significativa fluctuación eléctrica. Desde Aragua hasta Táchira, pasando por Caracas, Barinas, Barquisimeto, Mérida y Trujillo, los ciudadanos reportaron a través de las redes sociales un notable “bajón” eléctrico que provocó un alarmante parpadeo en sus electrodomésticos.
Impacto en los ciudadanos
Usuarios de distintas regiones del país expresaron su preocupación ante estas frecuentes intermitencias eléctricas, que ocurren de manera imprevista y en cualquier momento del día.
Esta situación no solo genera incomodidad en el día a día de los ciudadanos, sino que también pone en riesgo la vida útil de sus equipos electrodomésticos, que se ven sometidos a bruscos cambios de voltaje.
Sumatoria de problemas
A los episodios de “bajones” eléctricos se suman los recurrentes racionamientos, que en algunos casos se repiten hasta dos veces al día.
Esta combinación de factores afecta no solo la rutina de los ciudadanos, sino también la estabilidad de los servicios básicos en las comunidades, impactando negativamente en la calidad de vida de la población.
Alertas por el cambio climático
Recientemente, el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, visitó el embalse La Honda en la represa Uribante Caparo para evaluar los niveles de agua. Alertó sobre un descenso de al menos 18 metros debido a los efectos del cambio climático, lo cual afecta al Sistema Eléctrico Nacional. Esta situación evidencia la vulnerabilidad de la infraestructura eléctrica ante fenómenos ambientales extremos.
La situación eléctrica en Venezuela representa un desafío constante para los ciudadanos y las autoridades. Ante la persistencia de fluctuaciones e interrupciones en el suministro eléctrico, es crucial que se tomen medidas efectivas para garantizar la estabilidad del sistema. Se hace necesario realizar inversiones en infraestructura, así como implementar políticas que promuevan el uso eficiente de la energía y la diversificación de fuentes de generación. Además, es fundamental que se aborde de manera integral el problema del cambio climático para mitigar sus impactos en el sector eléctrico y en la vida de la población.