Científicos venezolanos de la Universidad Simón Bolívar (USB) han revelado un descubrimiento arqueológico de gran magnitud: el naufragio más extenso registrado en la historia, localizado en las aguas del archipiélago Las Aves, en Venezuela.
El desarrollo del descubrimiento
El arqueólogo José Miguel Pérez Gómez, líder del equipo de investigación, detalló que se trata de la Flota Francesa del rey Luis XIV, hundida en 1678 durante un enfrentamiento contra las tropas holandesas. Este suceso representa el naufragio más significativo en términos de cantidad de barcos perdidos en un solo evento.
De los 30 barcos que formaban la flota, 12 encallaron en los arrecifes de Las Aves, con miles de tripulantes a bordo. Pérez Gómez relata cómo la confusión durante la noche y el error de ubicación llevaron al trágico desenlace, marcando así una derrota militar crucial en la Guerra Franco-Holandesa.
La historia inicial del descubrimiento se remonta a los relatos de pescadores en la década de 1970, quienes mencionaron la presencia de estructuras sumergidas. Sin embargo, fue en 1998 cuando nuevas evidencias arqueológicas confirmaron la existencia de cañones bajo el agua, revelando la magnitud del naufragio.
El área del naufragio, que se extiende por más de tres kilómetros de arrecife, alberga no solo los restos de los barcos franceses, sino también artefactos de otras épocas y más de 130 cañones. Este paisaje submarino se ha convertido en una trampa para navegantes, siendo de difícil acceso debido a las corrientes peligrosas que lo rodean.
El arqueólogo Pérez Gómez enfatizó la peligrosidad del área y desaconsejó el acercamiento debido a las condiciones adversas y la importancia de su preservación como un sitio protegido. Este descubrimiento no solo enriquece el conocimiento histórico, sino que también subraya la necesidad de proteger y preservar nuestro patrimonio marítimo, así como la importancia de la seguridad en la navegación en estas aguas.
