En un encuentro histórico, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, lideró la instalación de la XXXIII Cumbre del Alba-TCP en Caracas, con el objetivo de abordar de manera conjunta los desafíos que plantea la construcción de un nuevo mundo en búsqueda de la felicidad social.
Establecimiento de la Agenda 2030
Durante la reunión, se llevó a cabo una sesión privada en la que se acordaron siete líneas de acción que conformarán la agenda del Alba 2030, con el fin de fortalecer la cooperación y el desarrollo en la región.
Entre estas líneas destacan la creación de una agencia de cooperación y desarrollo, la aprobación del plan de relanzamiento de Petrocaribe, la implementación del plan Alba Alimentos, la firma del Tratado de Comercio de los Pueblos, el impulso de un programa conjunto en áreas científicas, culturales y comunicacionales, la potenciación del plan Alba Salud y la creación de una agencia para mitigar los impactos del cambio climático.
Avanzando hacia un futuro compartido
En su discurso, Maduro instó a los líderes regionales a fortalecer la comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, con miras a la creación de una Confederación de pueblos y Estados en América Latina y el Caribe.
Destacó la importancia de la independencia política y la unidad como herramientas para lograr un desarrollo inclusivo y equitativo en la región.
El Alba-TCP ha demostrado ser una alternativa efectiva al neoliberalismo, consolidándose como una alianza clave para la defensa de los derechos de los pueblos. En este sentido, es fundamental que los líderes de la región continúen trabajando en conjunto para fortalecer la integración latinoamericana y caribeña, promoviendo la cooperación y el desarrollo sostenible en beneficio de todos.
Es necesario mantener el compromiso con los principios de independencia, paz, democracia, libertad y soberanía que han guiado la trayectoria del Alba-TCP, con el objetivo de garantizar un futuro próspero y equitativo para todos los habitantes de la región.