La tecnología contactless se está convirtiendo en una realidad tangible en Venezuela. Según Pedro Pacheco, presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela, para finales de 2024 entre el 75% y 80% de los bancos del país contarán con esta moderna tecnología, lo que marcará un importante avance en la digitalización del sistema financiero nacional. Esta evolución no solo promete mayor rapidez y eficiencia en las transacciones, sino también una adaptación a estándares globales que facilitan el comercio y el acceso a servicios bancarios.
Adopción rápida de la tecnología
En una entrevista con Unión Radio, Pacheco anticipó que para el primer trimestre de 2025, todas las entidades bancarias en Venezuela habrán adoptado completamente las tarjetas contactless. Este tipo de tarjetas permite realizar pagos simplemente acercándolas a un terminal de punto de venta (POS), eliminando la necesidad de insertar el plástico o introducir un PIN para montos menores.
Esta tecnología no solo agiliza las transacciones, sino que también reduce el contacto físico, una ventaja adicional en tiempos de pandemia.
Para asegurar una implementación fluida y evaluar la funcionalidad del sistema, el límite inicial para transacciones con tarjetas contactless será de 20 dólares. Este monto ha sido establecido estratégicamente para agilizar el proceso de adopción y asegurar que los usuarios y comercios se adapten gradualmente a la nueva tecnología.
Pacheco explicó que para consumos superiores a este límite, se requerirá la introducción de un PIN, lo que añade una capa de seguridad adicional a las transacciones de mayor valor.
Mayor seguridad en transacciones
Una de las preocupaciones con la introducción de nuevas tecnologías en el sector financiero es la seguridad. Pacheco destacó que, en función del monto de la transacción, las exigencias de seguridad serán mayores.
Esto significa que, si bien las compras menores a 20 dólares no requerirán la introducción de un PIN, las transacciones de mayor valor sí lo harán, asegurando así que los usuarios tengan protección adicional contra posibles fraudes.
La adopción de la tecnología contactless representa un gran beneficio tanto para los consumidores como para los comercios. Para los usuarios, la principal ventaja es la rapidez y conveniencia en las transacciones diarias, eliminando la necesidad de llevar efectivo y reduciendo el tiempo de espera en las cajas.
Para los comercios, esta tecnología puede incrementar la eficiencia operativa, reducir las filas y potencialmente aumentar las ventas al ofrecer una opción de pago más rápida y moderna.
Adaptación del sector bancario
La implementación de esta tecnología requiere una preparación considerable por parte de los bancos. Esto incluye la actualización de infraestructuras tecnológicas, capacitación del personal y campañas de información para educar a los usuarios sobre el uso y beneficios de las tarjetas contactless.
Sin embargo, el compromiso mostrado por las entidades bancarias y las autoridades regulatorias sugiere que el sector está dispuesto a enfrentar estos desafíos para ofrecer un servicio más avanzado y seguro.
Con la adopción masiva de la tecnología contactless, Venezuela da un paso significativo hacia la modernización de su sistema financiero. Esta evolución no solo coloca al país en línea con las tendencias globales, sino que también abre la puerta a futuras innovaciones en el sector bancario, como el desarrollo de aplicaciones móviles avanzadas y el incremento del comercio electrónico.
La transición hacia un sistema financiero más digital y eficiente promete no solo mejorar la experiencia del usuario, sino también impulsar la economía digital en el país.
La adopción de la tecnología contactless por parte de los bancos venezolanos es un desarrollo positivo que refleja un compromiso con la modernización y la mejora de la experiencia del usuario.
Con un 75% a 80% de los bancos preparados para finales de 2024 y la expectativa de una implementación completa para el primer trimestre de 2025, el sector bancario en Venezuela está bien encaminado hacia un futuro más eficiente y seguro. Este avance no solo beneficiará a los consumidores y comercios, sino que también contribuirá significativamente a la transformación digital del país.