Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han lanzado una advertencia sobre un rebrote de una versión más letal de la viruela del mono en la República Democrática del Congo (RDC). Aunque hasta ahora no se han detectado casos fuera de África, la situación ha encendido las alertas internacionales debido a la potencial propagación de esta peligrosa enfermedad.
El virus de la viruela del mono
La viruela del mono es una zoonosis, es decir, una enfermedad transmitida de animales a humanos. Está causada por el virus de la viruela del mono, perteneciente al género Orthopoxvirus, el cual incluye también al virus variola, responsable de la viruela humana.
Detectada por primera vez en 1970 en África, esta enfermedad se caracteriza por erupciones y lesiones cutáneas que suelen concentrarse en el rostro, las palmas de las manos y las plantas de los pies.
La transmisión del virus de la viruela del mono puede ocurrir de animales a humanos, y también de persona a persona. El contagio entre humanos puede suceder mediante contacto directo con la piel infectada, fluidos corporales, y también por contacto sexual.
Los síntomas iniciales incluyen fiebre, dolores musculares y fatiga, seguidos de la aparición de erupciones y lesiones cutáneas que pueden ser dolorosas.
Rebrote en la República Democrática del Congo
En 2022, la viruela del mono infectó a miles de personas en todo el mundo, afectando especialmente a hombres homosexuales y bisexuales. Sin embargo, los CDC han señalado que la versión actualmente devastando la RDC es más mortífera que las cepas anteriormente conocidas.
Este rebrote ha generado una preocupación significativa debido a su alta tasa de mortalidad y su potencial para propagarse más allá de África.
La República Democrática del Congo ha sido un foco de la viruela del mono desde su descubrimiento. Las autoridades sanitarias locales y organizaciones internacionales están trabajando para contener el brote.
Sin embargo, la combinación de factores como la infraestructura de salud limitada, los conflictos internos y la falta de acceso a vacunas complican los esfuerzos de control.
Respuesta internacional
Los CDC han instado a la comunidad internacional a tomar medidas preventivas. Las personas en riesgo, especialmente aquellas en contacto directo con infectados, deben vacunarse lo antes posible.
Además, se recomienda evitar el contacto con animales que podrían portar el virus y adoptar medidas de higiene estrictas.
La vacunación es una herramienta clave en la prevención de la viruela del mono. Existen vacunas eficaces que pueden proteger contra el virus, y su distribución en áreas afectadas es crucial para controlar el brote.
Los CDC han enfatizado la necesidad de una respuesta rápida y coordinada para prevenir la propagación del virus fuera de África.
Impacto global y preparativos
La comunidad global ha enfrentado brotes de enfermedades zoonóticas en el pasado, aprendiendo valiosas lecciones sobre la importancia de la vigilancia y la cooperación internacional.
La experiencia con la viruela humana, erradicada gracias a un esfuerzo global de vacunación, sirve como un recordatorio de que la acción concertada puede detener incluso las enfermedades más peligrosas.
Los países deben estar preparados para detectar y responder a posibles casos de viruela del mono. Esto incluye fortalecer los sistemas de salud pública, mejorar la capacidad de diagnóstico y asegurar un suministro adecuado de vacunas.
La coordinación entre organizaciones internacionales, gobiernos y entidades de salud es esencial para enfrentar la amenaza de la viruela del mono.
El rebrote de una versión más letal de la viruela del mono en la República Democrática del Congo es un recordatorio de la constante amenaza que representan las enfermedades infecciosas.
La respuesta de los CDC y otras organizaciones internacionales es crucial para contener el brote y evitar su propagación global. La vigilancia continua, la vacunación y la cooperación internacional son fundamentales para proteger la salud pública y prevenir futuras epidemias.