En la ciudad de Cumaná, Sucre, la noticia de la detención de una pareja por delitos graves ha conmocionado a la comunidad. Ángeles Jonás Marcano Betancourt, de 31 años, y Aurelys Josefina Figueroa García, de 29 años, fueron capturados por el Instituto Autónomo de Policía del estado Sucre (IAPES) tras descubrirse que estaban vendiendo material pornográfico y abusando sexualmente de sus propias sobrinas, menores de edad.
Venta de material pornográfico y abuso sexual: un crimen repudiable
La detención de esta pareja ha generado indignación y repudio en la sociedad, pues utilizar a sus propias familiares para obtener ganancias a través de la venta de material pornográfico es un acto despreciable.
Los informes policiales revelaron que la pareja almacenaba en sus dispositivos celulares y computadoras videos e imágenes de contenido sexual explícito protagonizados por las menores, vulnerando gravemente su integridad y dignidad.
Investigación y consecuencias legales
Las autoridades iniciaron una exhaustiva investigación a raíz de una denuncia anónima que alertaba sobre la presunta explotación y abuso de las menores por parte de la pareja detenida.
La Dirección de Control de Reuniones Públicas y Manifestaciones fue la encargada de llevar a cabo las averiguaciones, recopilando pruebas contundentes que confirmaban los terribles delitos cometidos.
Tras recabar todas las pruebas necesarias, la pareja fue puesta a disposición de la fiscalía quinta de Protección de la Familia del Ministerio Público, con competencia en el ámbito del Penal Ordinario. Serán las autoridades judiciales las encargadas de determinar las sanciones correspondientes para los acusados, quienes enfrentarán cargos por explotación infantil, abuso sexual y posesión de material pornográfico de menores.
Impacto en la sociedad y protección de los menores
Este lamentable suceso ha puesto de manifiesto la importancia de proteger a los menores de edad de cualquier forma de explotación y abuso. La sociedad civil y las autoridades competentes deben unirse para garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y niñas, brindándoles el apoyo necesario para superar situaciones traumáticas como la vivida por las sobrinas de la pareja detenida en Cumaná.
En conclusión, la detención de esta pareja por explotación infantil y abuso sexual es un recordatorio de la necesidad de estar alerta y actuar con determinación ante cualquier indicio de vulneración de los derechos de los menores. La justicia debe prevalecer en casos tan lamentables como este, asegurando que los responsables rindan cuentas por sus acciones atroces.