Panamá ha dado un paso significativo en el ámbito de la atención sanitaria a migrantes al firmar un convenio con la organización Médicos del Mundo-Francia (MDM-Francia). Este acuerdo, que se espera que sea ratificado en los próximos días, tiene como objetivo suplir la ausencia de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la región del Darién, una zona crítica en la ruta migratoria entre Colombia y Panamá.
Nuevo convenio con Médicos del Mundo
El Ministerio de Salud de Panamá ha confirmado que el convenio con Médicos del Mundo-Francia está próximo a ser firmado, como respuesta a la necesidad urgente de atención sanitaria para los migrantes en el Darién.
Este acuerdo representa un importante avance para asegurar la asistencia médica en una zona donde los desafíos son significativos.
Apoyo a migrantes en el Darién
La entrada de Médicos del Mundo en el Darién supone un alivio para los cientos de migrantes que atraviesan diariamente esta inhóspita selva. La atención sanitaria brindada por esta organización será crucial para mitigar los riesgos y peligros que enfrentan los migrantes durante su travesía, que incluyen desde la exposición a condiciones climáticas extremas hasta la violencia y los ataques de animales salvajes.
Suspensión de actividades de MSF
La decisión de Panamá de no renovar el convenio con Médicos Sin Fronteras (MSF) se dio tras discrepancias y denuncias sobre el aumento de la violencia contra migrantes en el Darién.
MSF reportó un alarmante número de casos de violencia sexual, lo que generó tensiones con las autoridades panameñas y llevó a la suspensión de sus actividades en la región.
Continuidad de la asistencia sanitaria
A pesar de la ausencia de MSF, el Ministerio de Salud reitera su compromiso de brindar asistencia en el Darién. Reconocen que aún enfrentan limitaciones en recursos y personal médico, pero destacan la colaboración con organizaciones como la Cruz Roja y Unicef para mantener la atención a los migrantes en esta área crítica.
La magnitud del flujo migratorio en el Darién plantea desafíos significativos para las autoridades y las organizaciones humanitarias. Con más de 160,000 personas transitando por la selva en lo que va del año, se estima que la cifra podría llegar hasta 800,000 para el año 2024. Ante esta situación, es crucial contar con el apoyo y la colaboración de diversas entidades para garantizar la protección y el bienestar de los migrantes en tránsito.