La inflación en Venezuela sigue su curso ascendente, alcanzando en julio de 2024 la variación mensual más alta del año tanto en bolívares como en dólares. Según el más reciente informe del Observatorio de Gasto Público (OGP) de Cedice Libertad, los precios de bienes y servicios experimentaron un incremento del 4,85% en bolívares y del 5,08% en dólares durante el mes de julio, reflejando una tendencia preocupante en la economía del país.
Inflación en bienes y servicios
El informe del OGP de Cedice Libertad señala que, al 30 de julio, el consumo promedio de una familia de tres personas en las principales ciudades de Venezuela —Caracas, Maracaibo y Valencia— alcanzó un valor mensual de 21.652,38 bolívares, lo que representa un aumento del 2,65% en la segunda quincena de julio. Este nivel de gasto exige más de cuatro salarios integrales de 4.884 bolívares para cubrir los costos básicos, lo que subraya la presión económica que enfrentan los hogares venezolanos.
El costo de la misma canasta de bienes y servicios, expresado en dólares estadounidenses, se situó en 596,35 dólares mensuales, con un incremento del 3,22% en la segunda mitad del mes. Estos datos reflejan cómo la inflación afecta tanto en moneda local como en divisas, un fenómeno que preocupa a los economistas y a la población en general.
Variación interanual y brecha cambiaria
El informe de Cedice Libertad también destaca un incremento significativo en la inflación interanual. Entre julio de 2023 y julio de 2024, la inflación en bolívares subió un 46,16%, mientras que en dólares el aumento fue del 17,08%. Este incremento en dólares, aunque menor en comparación con el bolívar, es particularmente alarmante, ya que se atribuye a la creciente brecha entre el tipo de cambio oficial del Banco Central de Venezuela (BCV) y el tipo de cambio libre.
Los comercios, que se ven obligados a utilizar la tasa del BCV, ajustan sus precios en dólares para alinearse con la realidad del mercado, lo que explica el alza en los precios en divisas. Esta situación resalta la falta de estabilidad en el mercado cambiario venezolano y sus efectos directos sobre el costo de vida.
Desglose del consumo mensual
El consumo promedio mensual de una familia venezolana se desglosa en varios rubros esenciales. Los alimentos representan la mayor parte del gasto, con un costo de 8.932,02 bolívares (246,15 dólares), seguidos por los servicios, que alcanzan los 7.205,82 bolívares (198,38 dólares).
Otros gastos significativos incluyen transporte, recreación, esparcimiento y cuidado personal, cuyos costos también han experimentado aumentos, reflejando el impacto de la inflación en todos los aspectos de la vida diaria.
Propuestas para abordar la Inflación
El equipo de investigadores del OGP de Cedice Libertad concluye que para reducir la inflación de manera sostenida es necesario implementar un cambio estructural en la economía venezolana. Proponen que se promuevan mayores libertades económicas para los ciudadanos, junto con el fortalecimiento del Estado de derecho y la autonomía del Banco Central de Venezuela. Este último es un factor crucial para garantizar la estabilidad monetaria y evitar la depreciación continua del bolívar, que ha exacerbado la crisis inflacionaria en el país.
La situación inflacionaria en Venezuela sigue siendo crítica, con un impacto profundo en el poder adquisitivo de la población. La necesidad de reformas estructurales y de una mayor estabilidad monetaria es evidente, ya que solo a través de estas medidas se podrá ofrecer un alivio real a los venezolanos que enfrentan un costo de vida cada vez más insostenible.
