Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Cabello rechaza y califica las redes sociales como un problema de Estado, denunciando su uso por parte de la oposición como un mecanismo de manipulación bajo la premisa de la libertad de expresión. En una rueda de prensa este lunes, Cabello afirmó que las plataformas digitales se han convertido en herramientas de dominación utilizadas por las grandes corporaciones, cuyo impacto depende de la reacción de los pueblos.
En su intervención, Cabello también desestimó las recientes declaraciones del fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, a quien acusó de actuar bajo los intereses de Estados Unidos. Además, el líder oficialista cerró cualquier posibilidad de diálogo con el excandidato opositor Edmundo González Urrutia, afirmando que el fascismo debe ser derrotado, no dialogado.
Redes sociales en la política que Cabello rechaza
Durante su intervención, Cabello abordó la influencia de las redes sociales en el contexto político venezolano. Según el dirigente, estas plataformas son utilizadas por la oposición para difundir información manipulada, aprovechando el concepto de libertad de expresión para socavar la estabilidad del Estado.
Cabello denunció que los dueños de las corporaciones que controlan estas redes tienen un interés en imponer una agenda específica, utilizando la tecnología como un medio de dominación.
El político destacó que en 70 países alrededor del mundo se han implementado regulaciones para controlar el contenido en redes sociales. Sin embargo, en su opinión, la verdadera efectividad de estas plataformas depende de la capacidad de los pueblos para discernir la información que reciben y resistir la influencia externa.
A pesar de los intentos de censura, Cabello insistió en que la responsabilidad recae en la población para no dejarse manipular por estos medios.
Críticas al fiscal de la corte penal internacional
Otro de los puntos relevantes de la rueda de prensa fue el pronunciamiento de Cabello respecto al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan. El líder del PSUV desestimó las declaraciones del fiscal, argumentando que su posición está influenciada por los intereses de Estados Unidos.
Según Cabello, Khan recibe su salario de Washington, lo que, en su opinión, lo incapacita para actuar de manera imparcial, especialmente en asuntos que involucren a naciones como Estados Unidos o Israel.
Cabello sugirió que la postura del fiscal de la CPI es una muestra más de la injerencia extranjera en los asuntos internos de Venezuela. El dirigente oficialista utilizó esta oportunidad para reforzar su discurso sobre la soberanía nacional y la resistencia ante lo que considera una campaña internacional para desestabilizar al país.
Para Cabello, la CPI se ha convertido en un instrumento al servicio de las potencias que buscan imponer su voluntad sobre los países que desafían su hegemonía.
Cabello rechaza diálogo con la oposición
En cuanto al panorama político interno, Cabello descartó rotundamente cualquier posibilidad de diálogo con el excandidato opositor Edmundo González Urrutia. El dirigente del PSUV argumentó que no se puede negociar con quienes él califica de fascistas, y que la única respuesta ante ellos debe ser la derrota total.
Para Cabello, la oposición no representa un interlocutor válido, sino un enemigo que busca la destrucción del proyecto bolivariano.
Esta postura de Cabello refleja una línea dura dentro del chavismo, que se resiste a cualquier forma de acercamiento con sectores de la oposición. Su rechazo al diálogo subraya la polarización política que domina el escenario venezolano, donde las posibilidades de reconciliación parecen cada vez más lejanas.
Cabello, conocido por su retórica combativa, dejó claro que su visión es de confrontación y no de conciliación, lo que dificulta aún más la posibilidad de encontrar una salida negociada a la crisis política del país.
Las declaraciones de Diosdado Cabello reflejan una visión donde la confrontación y la desconfianza predominan en el discurso político. En un contexto tan polarizado, es crucial que se fomente el diálogo como