En el ranking de agosto elaborado por CB Consultora, Daniel Noboa, presidente de Ecuador, se destaca como el mandatario suramericano con mejor valoración ciudadana. Este estudio, que mide el clima social y las perspectivas electorales, revela una mejora en la imagen positiva de Noboa en comparación con el mes anterior. La encuesta, realizada entre el 15 y el 18 de agosto a más de 12.000 personas, proporciona un panorama detallado sobre la aprobación y desaprobación de los presidentes en Sudamérica.
Daniel Noboa: el líder mejor valorado
En agosto, Daniel Noboa lidera el ranking con una aprobación del 52,7%, un incremento respecto al 51,5% registrado en julio. La mejora en su valoración indica un sólido apoyo ciudadano hacia su gestión.
En contraste, el índice de desaprobación de Noboa se sitúa en 44,1%, mostrando una ligera disminución en comparación con el mes anterior. Esta tendencia positiva subraya la creciente aceptación del presidente ecuatoriano, quien ha demostrado un liderazgo efectivo en su país.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ocupa el segundo lugar en el ranking con una favorabilidad del 52,5%. Aunque Lula mantiene una posición destacada, su valoración ha disminuido ligeramente desde el 53,6% de julio.
Su índice de desaprobación se ubica en 44,6%, lo que sugiere una estabilidad en su aceptación a pesar de la leve caída en su popularidad. Este resultado refleja la consistencia en la percepción pública sobre su administración.
Luis Lacalle Pou: ascenso notable
Luis Lacalle Pou, presidente de Uruguay, ha escalado al tercer puesto con una imagen positiva del 51,2%. Este aumento respecto al 48,7% de julio destaca su creciente popularidad entre los ciudadanos uruguayos.
Su índice de desaprobación en agosto es de 45,1%, indicando una aceptación relativamente alta en comparación con otros mandatarios. Este ascenso sugiere una percepción favorable hacia su gestión en Uruguay.
El presidente de Argentina, Javier Milei, quien lideró el ranking en julio con una aprobación del 52,1%, ha descendido al cuarto puesto con una favorabilidad del 50,6%. Su índice de desaprobación ha aumentado a 46,2%, reflejando una caída en la percepción positiva hacia su administración.
Este cambio en su valoración podría estar relacionado con diversos factores políticos y económicos que han impactado la percepción pública de su liderazgo.
Otras posiciones destacadas aparte de Daniel Noboa
En la parte inferior del ranking, el presidente de Paraguay, Santiago Peña, muestra un incremento en su favorabilidad al 47,3%, superando el 45,2% del mes anterior.
Sin embargo, su índice de desaprobación se mantiene alto en 47,1%. En Bolivia, Luis Arce también experimenta una caída en su aprobación al 46,2%, con un aumento en la desaprobación al 50,3%. Estos resultados indican desafíos significativos en la percepción pública de su gestión.
Finalmente, el presidente de Chile, Gabriel Boric, sigue siendo uno de los mandatarios menos valorados con un respaldo del 37%, frente al 36,3% de julio.
Su índice de desaprobación alcanza el 58,2%, reflejando una fuerte crítica hacia su administración. Estos números destacan las dificultades que enfrenta Boric para consolidar un apoyo sólido en su país.
Reflexiones sobre la percepción presidencial
Los resultados del ranking de CB Consultora revelan una variada aceptación entre los presidentes suramericanos, con Daniel Noboa destacándose como el líder mejor valorado.
La percepción positiva de su gestión sugiere un respaldo significativo de los ciudadanos ecuatorianos. Para los mandatarios en posiciones más bajas, como Gabriel Boric y Javier Milei, es crucial abordar las preocupaciones públicas y fortalecer la comunicación con la ciudadanía para mejorar su imagen.
Las recomendaciones para los presidentes que enfrentan desafíos en su valoración incluyen el enfoque en políticas que aborden las necesidades y expectativas de los ciudadanos, así como la implementación de estrategias de comunicación efectivas.
Mantener la transparencia y la rendición de cuentas puede ayudar a aumentar la confianza pública y mejorar la percepción de su liderazgo. Estos pasos son esenciales para lograr una administración más efectiva y bien recibida en el contexto político actual.
