El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) informó que la inflación mensual de octubre en Venezuela alcanzó el 9,6%, más del doble del 3,4% registrado en septiembre. Este incremento marca una preocupante aceleración en la variación de precios, producto de la reciente depreciación del bolívar, que afectó tanto a los consumidores como al panorama económico del país. La inflación acumulada de 2024 ya alcanza un 43%, mientras que la tasa interanual se eleva a un 51%, lo que evidencia una tendencia inflacionaria en alza.
Aumento de precios en todos los rubros
Todos los sectores económicos se vieron afectados por la aceleración inflacionaria, aunque el alza fue particularmente visible en algunos rubros esenciales. Los alimentos, que representan una gran parte del gasto mensual de las familias, aumentaron en un 10,3%. Otros sectores como vestimenta y calzado también reflejaron incrementos, alcanzando un 11,4%. Equipos para el hogar y alquileres registraron subidas de 11,1% y 10,9%, respectivamente. Estos datos reflejan el impacto directo de la devaluación en los precios, lo que genera un efecto inmediato en los productos de primera necesidad.
Escalada inflacionaria por regiones
En términos regionales, la inflación también mostró diferencias significativas. Nueva Esparta presentó un aumento de precios del 10,1%, mientras que Zulia experimentó una inflación del 9,8%. Por su parte, Anzoátegui y Caracas registraron alzas del 8,9% y 9,5%, respectivamente. Estas variaciones reflejan cómo la depreciación de la moneda afecta de manera similar en varias zonas, aunque con algunas diferencias que responden a factores regionales.
La devaluación como motor inflacionario
El informe del OVF subraya que la inflación ha aumentado a raíz de la continua depreciación del bolívar frente a otras monedas. Este factor desencadena un proceso de ajuste de precios, afectando tanto a la economía local como a la estabilidad del mercado. La debilidad de la moneda nacional contribuye a una inflación que repercute especialmente en los bienes importados y en aquellos productos que dependen de insumos internacionales, creando así un ciclo en el que los costos suben rápidamente.
Previsiones para el cierre de 2024
De cara a los últimos meses del año, las proyecciones indican que la inflación podría mantenerse en niveles elevados. Según el OVF, el rezago en el impacto de la devaluación podría continuar presionando los precios en noviembre y diciembre. Este contexto sugiere que, mientras persistan las condiciones actuales, la inflación seguirá siendo un problema que afectará el poder adquisitivo de los venezolanos, obligando a los consumidores a enfrentar precios cada vez más altos en bienes y servicios esenciales.
Perspectiva económica y desafío futuro
La reciente aceleración inflacionaria es una muestra de la fragilidad macroeconómica de Venezuela, donde las variaciones en el tipo de cambio afectan de manera directa los precios. El aumento sostenido de la inflación plantea un desafío urgente para la estabilidad económica, ya que tanto los consumidores como el sector productivo enfrentan mayores dificultades para planificar sus finanzas. En este contexto, el OVF insta a tomar medidas que logren estabilizar la economía y reducir el impacto de la devaluación, en busca de proteger el poder adquisitivo y mejorar la calidad de vida en el país.
Durante el tercer trimestre de 2024 la actividad económica registró un aumento de 5,9% en términos interanuales. Ese resultado obedeció determinantemente al aumento de la producción petrolera en 13,0% y en menor medida a la actividad no petrolera cuyo crecimiento alcanzó 4,8%. A… pic.twitter.com/ZDWPPDK0Yr
— Observatorio Venezolano 🇻🇪 de Finanzas (@observafinanzas) November 6, 2024