La detención del gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo en Venezuela bajo acusaciones de espionaje ha generado una nueva crisis diplomática entre ambas naciones. El suboficial, quien viajaba para reunirse con su familia, fue interceptado por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim). Argentina exige su inmediata liberación y considera las acciones de los organismos venezolanos como infundadas y arbitrarias, elevando la tensión en las relaciones bilaterales.
Detención bajo sospechas de espionaje
Nahuel Agustín Gallo, suboficial de la Gendarmería Nacional Argentina, fue detenido el 9 de diciembre al intentar ingresar a Venezuela desde Colombia.
Según declaraciones de su esposa, María Gómez, el arresto se produjo después de que funcionarios venezolanos revisaran su teléfono móvil y encontraran mensajes críticos hacia el gobierno de Nicolás Maduro. Estos textos sirvieron como base para las acusaciones de espionaje que derivaron en su incomunicación.
Respuesta inmediata del gobierno de Argentina
El Ministerio de Seguridad de Argentina recibió notificación de la detención el 10 de diciembre, iniciando gestiones formales para exigir la liberación de Gallo.
En un comunicado oficial, la Cancillería argentina calificó de “inaceptable” la detención y aseguró que se agotarán todas las instancias internacionales para lograr su libertad. “Es una acción desproporcionada y arbitraria que contraviene las normas internacionales”, afirmó el gobierno.
El drama de una familia separada
María Gómez, residente en Argentina, compartió entre lágrimas su angustia al no poder contactar a su esposo. Explicó que habían planeado un reencuentro familiar en Caracas, donde Gallo planeaba visitar a su hija de 2 años.
“Esto es una pesadilla; no sabemos en qué condiciones lo tienen ni cuándo podremos verlo”, expresó, instando a las autoridades argentinas a intensificar los esfuerzos para su liberación.
Implicaciones diplomáticas entre Argentina y Venezuela
El caso ha intensificado las ya tensas relaciones entre Argentina y Venezuela. En un contexto marcado por críticas internacionales hacia el gobierno de Maduro, Argentina lidera junto a otros países llamados para proteger los derechos humanos en la región.
La reciente exigencia de salvoconductos para ciudadanos asilados en la embajada argentina en Caracas evidencia un deterioro en la cooperación bilateral.
Reacciones internacionales
El caso ha resonado más allá de los países involucrados. Estados Unidos ha manifestado su respaldo a Argentina y su condena a lo que considera un nuevo abuso del gobierno venezolano. Organismos internacionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA), también han sido instados a mediar en el conflicto y garantizar la liberación del suboficial.
La detención de Nahuel Gallo pone de manifiesto las tensiones persistentes entre Venezuela y la comunidad internacional. Mientras Argentina insiste en su pronta liberación y denuncia arbitrariedades, el incidente refuerza las críticas hacia las políticas represivas del gobierno venezolano. La resolución de este conflicto será clave para definir el rumbo de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones.
Un gendarme argentino cruzó a Venezuela a visitar a su mujer e hija y fue detenido por el régimen chavista.
Exigimos la INMEDIATA liberación de este ciudadano argentino. Maduro, cada minuto que lo retengas va a ser un paso más hacia tu propio fin. pic.twitter.com/TisulVGPMp
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) December 13, 2024