En San Carlos, estado Cojedes, fue escenario de un suceso desgarrador que dejó a la comunidad consternada. Un hombre, identificado como Juan Villegas, acabó con la vida de su esposa, Kira Matute, antes de quitarse la suya en una reconocida farmacia de la localidad. Este trágico acontecimiento resalta una problemática alarmante: la violencia de género y sus devastadoras consecuencias.
La escena del crimen
La farmacia, ubicada en la avenida Bolívar, se convirtió en un escenario de horror. Kira Andreina Matute Suárez, de 35 años, fue hallada en el suelo, con una herida mortal en la cabeza.
Los paramédicos que llegaron al lugar encontraron su cuerpo en posición decúbito lateral izquierdo, vistiendo un suéter negro con mangas doradas, un jean azul y calzado deportivo negro. Su ex pareja agredió de manera brutal a la víctima, y las circunstancias de su muerte fueron escalofriantes.
.
El hombre y su trágico final
Juan Villegas, de 42 años, fue el perpetrador de este crimen atroz. Su cuerpo fue encontrado en el mismo lugar, en posición decúbito lateral derecho, con una herida de bala en la cabeza. Vestía una franela blanca, bermuda negra y calzado deportivo gris.
A su lado, estaba el arma utilizada en el ataque. La relación entre ambos había estado marcada por la violencia, y existía una orden de alejamiento en su contra, según informes de la policía.
Antecedentes de violencia entre el hombre y su esposa
La pareja se encontraba en proceso de separación desde hacía tres meses, un factor que probablemente exacerbó la situación. Kira había denunciado a Juan por maltrato físico, lo que llevó a la restricción de acercamiento.
Sin embargo, el agresor decidió ignorar esta orden y se presentó en el lugar de trabajo de su ex esposa con la intención de poner fin a su vida. Los testigos relatan que el ataque sorprendió y aterrorizó de repente, mientras Kira intentaba escapar hacia el área de lavandería antes de que su agresor la alcanzara.
.
Consecuencias de la tragedia
Este acontecimiento ha dejado una profunda huella en la comunidad de San Carlos y ha conmovido a todos, especialmente a los tres hijos de la pareja, quienes ahora se encuentran huérfanos. La intervención de más de 80 funcionarios de diversos cuerpos de seguridad es un indicativo de la seriedad del caso, mientras se espera que las investigaciones arrojen luz sobre este oscuro episodio. La historia de Kira y Juan es un recordatorio de la necesidad urgente de abordar la violencia de género y proteger a las víctimas de situaciones de riesgo.
La tragedia que ocurrió en San Carlos no solo marca el fin de una vida, sino que también resalta una realidad que afecta a muchas familias en el país. La lucha contra la violencia de género debe ser una prioridad, y se requiere un cambio cultural que promueva el respeto y la igualdad en las relaciones.