Desde su elección en 2013, el papa Francisco redefinió el papel diplomático del Vaticano. Más allá de los asuntos eclesiásticos, su influencia se extendió al escenario internacional, donde promovió el diálogo, la paz y los derechos humanos. Su poder blando marcó una nueva era en la diplomacia vaticana.
Logros diplomáticos del Papa Francisco
Uno de los mayores hitos diplomáticos del pontífice fue su mediación entre Estados Unidos y Cuba en 2014. Francisco facilitó conversaciones secretas entre ambos gobiernos, lo que derivó en el restablecimiento de relaciones diplomáticas y la histórica visita de Barack Obama a La Habana.
En Colombia, respaldó activamente el proceso de paz entre el gobierno y las FARC. Durante su visita en 2017, llamó a la reconciliación nacional. También intentó interceder en la crisis política de Venezuela entre 2016 y 2017, aunque sus esfuerzos no fructificaron.
Intentos fallidos en Ucrania
En 2022, el papa calificó como “asquerosa” la guerra en Ucrania. Se mostró dispuesto a reunirse con Vladimir Putin y buscó acercamientos con la Iglesia Ortodoxa Rusa. Sin embargo, la diplomacia vaticana enfrentó sus límites ante intereses geopolíticos y fracturas religiosas, sin lograr influir en el conflicto.
Compromiso con los migrantes y el ambiente
Desde el inicio de su pontificado, Francisco denunció la indiferencia frente a las crisis migratorias. En 2013, visitó Lampedusa, donde condenó la muerte de miles de migrantes en el Mediterráneo. Además, criticó abiertamente las políticas de deportación de Donald Trump, recordando el deber cristiano de acoger al extranjero.
En 2015, publicó la encíclica Laudato Si’, que convirtió el cambio climático en una causa moral. El documento influyó en las negociaciones de la COP21 de París, llamando a una “conversión ecológica” global.
Impulso al diálogo interreligioso y la equidad sanitaria
En 2019, firmó un documento sobre fraternidad humana con el Gran Imán de Al-Azhar, un gesto sin precedentes en el diálogo entre cristianos y musulmanes.
Durante la pandemia de la covid-19, el papa abogó por la distribución equitativa de vacunas y condenó el “nacionalismo sanitario”, defendiendo la dignidad de los pueblos más vulnerables.
En África, abrió la primera Puerta Santa fuera de Roma, en la República Centroafricana, promoviendo la reconciliación en un país marcado por el conflicto.
Críticas y legado
Las posturas del papa Francisco en temas como migración, justicia social y críticas al capitalismo generaron fricciones con sectores conservadores. Para algunos fue un líder progresista; para otros, un pontífice excesivamente político.
A pesar de las críticas, Francisco demostró que la autoridad moral y la influencia espiritual pueden ser herramientas efectivas en tiempos de polarización. Su legado diplomático, basado en el poder blando, posicionó al Vaticano como un actor relevante en los principales desafíos globales.