Venezolano detenido por ICE pese a parole/ Ronald Maldonado, un migrante venezolano residenciado en Georgia, fue detenido por funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), a pesar de contar con un permiso vigente bajo el programa de parole humanitario.
El arresto se produjo cuando los oficiales irrumpieron en su vivienda sin orden judicial, según denunció su abogada. Cámaras de seguridad registraron el momento en que los agentes ingresaron a la fuerza, generando alarma en sus familiares.
Violación de derechos constitucionales
La defensora legal de Maldonado declaró a la cadena Univisión que el procedimiento fue irregular y violó sus derechos constitucionales. “No había una orden judicial que autorizara la entrada, lo que convierte esta actuación en una detención arbitraria”, sostuvo.
El parole humanitario es un mecanismo que permite a ciertos migrantes permanecer en Estados Unidos por razones humanitarias urgentes o de beneficio público significativo. Maldonado, quien estaba amparado por este estatus, enfrenta ahora un proceso legal incierto.
Venezolano detenido por ICE pese a parole: Temor a una deportación a El Salvador
Los familiares del detenido expresaron su preocupación por la posibilidad de que Maldonado sea deportado a El Salvador, pese a su nacionalidad venezolana. “Estamos angustiados, tememos por su seguridad si es enviado a un país donde no tiene vínculos”, señalaron en declaraciones a medios locales.
Por el momento, Maldonado permanece en un centro de detención para migrantes a la espera de su audiencia ante un juez de inmigración. La defensa legal solicita la liberación inmediata y una revisión del procedimiento por presunta violación al debido proceso.
Reacciones de la comunidad migrante
El caso ha causado indignación entre activistas y organizaciones de derechos humanos que ven en esta acción un precedente preocupante. “Si el parole humanitario no ofrece garantías mínimas de protección, ¿qué les queda al resto de los migrantes?”, cuestionó una vocera del colectivo Venezuela en Libertad.
Este incidente reabre el debate sobre los límites de las facultades del ICE y la necesidad de garantizar que las leyes migratorias se apliquen con respeto a los derechos civiles de los beneficiarios.