Una acalorada discusión terminó en violencia extrema en la parroquia Antímano de Caracas, donde seis personas fueron detenidas por funcionarios del Cicpc tras lesionar gravemente a un hombre de 29 años con armas blancas, durante una riña motivada por conflictos personales.
Todo comenzó con una discusión personal
La investigación liderada por la Delegación Municipal Caricuao reveló que el ataque ocurrió tras un enfrentamiento verbal entre la víctima y los implicados, quienes tenían problemas personales previos con el agredido.
Durante el altercado, los detenidos desenfundaron cuchillos y machetes, y se abalanzaron sobre el hombre, causándole múltiples heridas. La víctima fue trasladada de emergencia al Hospital Pérez Carreño, donde fue intervenido quirúrgicamente y actualmente se encuentra fuera de peligro.
¿Quiénes son los detenidos?
Los seis presuntos responsables del ataque fueron identificados como:
- Osmar José Aquino Arévalo (33)
- Yuleidis Alondra Pinto Guzmán (25)
- Adriana Valentina Ruiz Flores (22)
- Pascual José Silva Yépez (32)
- Ali Eduardo Gil Hurtado (22)
- Enrique José Ávila Mendoza (30)
El grupo fue capturado en la avenida intercomunal de Antímano, en el municipio Libertador. Al ser verificados en el Sistema de Investigación e Información Policial (Siipol), se descubrió que Osmar Aquino posee antecedentes por porte ilícito de arma, tráfico de drogas y aprovechamiento de bienes robados.
Asimismo, Enrique Ávila Mendoza resultó estar solicitado por el Juzgado Primero de Juicio de Barlovento, por su presunta implicación en un asalto a una unidad de transporte público.
A disposición del Ministerio Público
Tras la captura, todos los implicados quedaron a la orden del Ministerio Público, mientras se desarrolla el proceso judicial correspondiente. Las autoridades continúan investigando si los agresores forman parte de alguna banda criminal o si se trató de un hecho aislado.
Violencia entre conocidos, un problema creciente
Este caso refleja un patrón cada vez más frecuente en zonas urbanas: la escalada de conflictos personales hacia actos violentos, donde incluso conocidos o vecinos terminan protagonizando agresiones físicas con armas.
Las autoridades instan a la población a resolver disputas por vías pacíficas y acudir a los organismos competentes ante amenazas o situaciones de tensión comunitaria.