El despliegue militar de EE.UU. en el Caribe elevó la tensión regional. En ese sentido, Nicolás Maduro anunció un plan de defensa con armamento pesado y misiles entre Caracas y La Guaira. La estrategia, presentada como una respuesta directa al movimiento militar estadounidense, busca proteger la franja donde se ubican el principal puerto y aeropuerto del país.
Un plan de defensa territorial frente al Caribe
Maduro mostró un mapa donde se observa el eje Caracas-La Guaira, zona que aseguró ya cuenta con sistemas activos de fusiles, misiles y armamento pesado. Según su declaración, el dispositivo cubre comunidades, calles y sectores estratégicos que enlazan la capital con la costa central.
El mandatario afirmó que el plan no fue diseñado exclusivamente por especialistas militares, sino por “las mentes pensantes del pueblo empoderado”. También destacó la instalación de un parque de armas para los integrantes de la Milicia, un cuerpo civil con entrenamiento militar adscrito a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
Ocho millones de inscritos en la Milicia
El gobierno mantiene desde agosto un proceso de alistamiento que, según cifras oficiales, alcanzó más de ocho millones de inscritos. Tras la movilización inicial de EE.UU. en el Caribe, la FANB activó jornadas de adiestramiento y creó unidades comunales milicianas en más de cinco mil zonas del país.
Maduro aseguró que el sistema de armas ya está operativo y preparado para defender la zona costera, donde se encuentran el Puerto de La Guaira y el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía.
Un conflicto político marcado por acusaciones cruzadas
Desde agosto, EE.UU. mantiene operaciones aéreas y navales en el Caribe. Washington sostiene que se trata de un operativo contra el narcotráfico. Caracas lo interpreta como una “amenaza” y un intento de presionar un cambio político.
La tensión escaló esta semana. Maduro afirmó que un ataque militar contra Venezuela sería “el fin político” del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Sin embargo, reiteró estar dispuesto a hablar con él “cara a cara”.
Trump declaró que “podría haber discusiones” con Maduro porque “Venezuela quiere hablar”. Aseguró además que ya tomó una decisión sobre las próximas medidas hacia el país, sin ofrecer detalles.





