José Arimateo Rojas Baptista (54) fue hallado muerto en el interior de la estación de servicios El Samán, ubicada en la avenida Rómulo Gallegos, a la altura de la urbanización Horizonte.
Jenifer del Carmen Rojas –hija de la víctima- se dirigió al local la noche del domingo junto a funcionarios de la Policía del Municipio Sucre y notaron que las puertas del establecimiento no tenían los candados. Al ingresar, vieron el cuerpo del comerciante tendido en el suelo, con una herida en la cabeza.
Agentes del Eje Este de Investigación de Homicidios iniciaron las pesquisas. Creen que el homicida conocía a Rojas, toda vez que no encontraron evidencias de que hayan forzado la entrada.
En esta estación se suministraba combustible a precios subsidiados. Pero el fin de semana la situación cambió, y en el local comenzaron a venderlo al precio habitual de 50 centavos de dólar el litro.
En El Valle
Los hermanos Aníbal (35) y Anthony (19) Flores fueron atacados a tiros durante una fiesta de cumpleaños celebrada en la calle 18 de la parroquia El Valle. Era la madrugada del domingo.
Los responsables del doble homicidio pertenecerían a una banda delictiva encabezada por un sujeto apodado Pitufo, indicaron parientes de las víctimas en la morgue de Bello Monte.
De acuerdo con testigos, al menos treinta sujetos armados quisieron ingresar al lugar donde se desarrollaba la celebración. Los presentes les negaron el acceso, lo que se generó una trifulca.
Los hermanos Flores gritaron improperios contra los sujetos armados y éstos los arrastraron desde el interior de la vivienda hacia la calle, donde les dispararon en varias ocasiones. Al menor lo degollaron.
Agentes de la policía judicial levantaron los cuerpos y los trasladaron a la medicatura forense.
Otro hecho similar ocurrió en la calle El Molino de Lídice en horas de la mañana del domingo.
La víctima, Wilmer José Púa Rodríguez de 30 años de edad, se desempeñaba como depositario en una óptica de Los Ruices.
El hombre se encontraba en una fiesta. A las 7:00 am del domingo, decidió retornar a su vivienda, ubicada en el mismo sector y fue abordado por otros sujetos.
Púa Rodríguez tenía cinco heridas por proyectiles: cuello. Le robaron sus dos teléfonos celulares.
Otro cadáver fue levantado en la calle Las Margaritas de la parroquia La Vega. Era un hombre con múltiples heridas por arma de fuego. Aún no ha sido identificado.
Con información de: Crímenes sin Castigo
