La revelación de la Administración Biden llega en la víspera de un encuentro de alto nivel en Roma del jefe diplomático del país asiático, Yang Jiechi, y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
La revelación ha llegado en la víspera de un encuentro de alto nivel en Roma entre el jefe diplomático de China, Yang Jiechi, y el asesor de seguridad nacional de EE.UU., Jake Sullivan.
El propio Sullivan advirtió este domingo a China de que se enfrentará a represalias por parte de Washington si colabora con Moscú para que Rusia pueda evadir las sanciones económicas impuestas por Occidente por la invasión de Ucrania.
«Estamos en comunicación de forma directa y privada con Pekín, y hemos dejado claro que habrá sin duda consecuencias si hay intentos de evasión de las sanciones masivas o un apoyo a Rusia para compensarlas», dijo en una entrevista con la CNN.
Hasta ahora, la inteligencia de EE.UU. ha asegurado que cree que Pekín estaba al corriente de los planes de invasión de Ucrania por parte de Rusia, pero no de la extensión de la agresión rusa, que afecta ya a buena parte del país y que asedia a sus principales ciudades.
Acuerdo de importación de gas
Pocos días antes de la invasión, China cerró con Rusia un acuerdo para la importación de gas durante treinta años a través de un nuevo gasoducto y el presidente ruso, Vladímir Putin, no ejecutó su ataque contra el país vecino hasta la finalización de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín, celebrados el mes pasado.
Hasta ahora China ha buscado no romper su alianza con Rusia a pesar de la guerra. Se ha negado a llamar «invasión» a la agresión rusa, se ha alineado con las posturas de Moscú en el Consejo de Seguridad de la ONU y ha evitado hacer condenas expresas. En su lugar, ha optado por pedir «templanza» y «diálogo» a «todas las partes».
Un portavoz del ministerio de Exteriores de China aseguró en el mismo día del comienzo de las hostilidades que su país no enviaría armas a Rusia. «Hay una diferencia entre China y EE.UU. en esto», dijo en un ataque a Washington, que ha autorizado en el último año 1.200 millones de dólares en asistencia militar a Ucrania.