El regreso a clases presenciales en la Universidad Central de Venezuela todavía es una incertidumbre para los estudiantes de algunas facultades. Escuelas como Odontología, acumulan más de dos años sin actividades en las aulas y clínicas; mientras los alumnos permanecen en un limbo académico sin respuestas razonables por parte de las autoridades.
“Cada facultad es autónoma”
En diversas entrevistas con los medios de comunicación el rectorado de la UCV, dirigido por Cecilia García Arocha, ha respondido al respecto que cada facultad es autónoma de sus decisiones sobre el regreso a clases. Igualmente la rectora coloca sobre la mesa todos los problemas, que a su juicio, impiden el retorno a las aulas: La pandemia, infraestructura, presupuesto, sueldos y salarios de profesores y trabajadores; entre otros.
No obstante, al indagar entre grupos estudiantiles y profesores; se percibe que tampoco ha existido una voluntad real para retomar las actividades académicas por parte de las autoridades.
En cuanto a la pandemia, las universidades se han adaptado a las normas de bioseguridad para retomar las clases de la manera más segura posible. Los profesores en su mayoría están vacunados contra el Sars Cov 2. Y se conoce con mayor certeza tras dos años de convivencia con el virus las medidas efectivas para evitar su contagio.
El triste ejemplo de la Facultad de Odontología de la UCV
Una de las Facultades más afectadas con la falta de disposición por parte de las autoridades para hacer efectivo el regreso a clases es Odontología. De acuerdo a fuentes estudiantiles, que prefirieron mantener el anonimato por temor a represalias, explicaron que la Dra. Nancy León Martinez (Decano de Odontología) remite la decisión del retorno a clases a los jefes de cada cátedra. A su vez, lograr que en su conjunto estén de acuerdo todas las cátedras en fijar una fecha definitiva para el regreso a clases y prácticas clínicas ha sido imposible.
Las razones de los docentes que se niegan en retomar sus actividades profesionales son conocidas: Sueldos injustos, precio de la gasolina para sus traslados, condiciones de las aulas; entre otros. Problemas que no dejan de ser ciertos; pero en la lucha por su reivindicación afectan a los más indefensos, los estudiantes.
En su mayoría los profesores son profesionales que hacen vida laboral en el sector privado y que nadie los obliga a ser docentes de la UCV. También pasaron por los mismos salones de clases y como estudiantes, tuvieron la oportunidad de recibir una educación de calidad y gratuita.
Emotivo mensaje de Profesor que llama al regreso a clases
Como en toda comunidad, muchos de sus integrantes suelen estar del lado correcto de la historia. No todos tienen falta de empatía con los estudiantes y cumplen con el compromiso moral que representa ser docente de la Universidad Central de Venezuela.
Este fue el caso del Cirujano Bucal y Profesor de la UCV, USM y UJAP, Carlos Petit Lorusso. Quien a través de un emocionante mensaje, que se hizo viral en las redes sociales, fijó su posición con sosiego pero valiente sobre el regreso a clases.
El profesor tocó la fibra emocional de todos los afectados que sienten, como tras dos años de ausencia académica, se plantean abandonar su sueño de recibirse como Odontólogos en el Aula Magna de la Universidad Central.
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Autoridades bajo la lupa legal
El deber de las autoridades universitarias no solo es moral, sino también legal. La autonomía universitaria tiene límites que se trazan cuando se trasgreden los derechos de la comunidad estudiantil.
Incluso, como funcionarios públicos, los responsables de la conducción de la UCV, Decanos de Facultades y respectivos Jefes de Cátedras están obligados a rendir cuentas públicas.
En ese sentido, grupos estudiantiles consideran acudir a las instancias pertinentes en caso de continuar en el estado de indefensión por la falta de respuesta tras dos años sin clases. De esta manera, prometieron hacer público un conjunto de acciones legales que llevarían a cabo en los próximos días.
