Este viernes 24 de junio, se conmemoran los 201 años de la Batalla de Carabobo, la cual marcó la liberación de Venezuela ante las tropas españolas. El combate que estuvo liderado por Simón Bolívar, se llevó a cabo, cerca de la ciudad de Valencia, el 24 de junio de 1821, marcando un antes y un después en la historia de Venezuela.
En esta fecha, se enfrentaron 4.279 realistas, a cargo del mariscal de campo español, Miguel de la Torre, contra 6.500 patriotas al mando del General en Jefe Simón Bolívar, quien contó con la ayuda de Manuel Cedeño, Ambrosio Plaza, José Antonio Páez y otros líderes de la independencia del país.
A pesar de tener que esperar 2 años más, para que las tropas lideradas por Bolívar, lograran reubicarse, con la batalla naval del Lago de Maracaibo, la batalla de Carabobo es una de las más importantes para la historia de Venezuela porque le dio la baja a más del 50% de las tropas españolas.
La victoria lograda por Simón Bolívar, resultó decisiva para la liberación de Caracas y el territorio venezolano, hecho que se logrará de manera definitiva en 1823 con la Batalla Naval del Lago de Maracaibo y la toma de las fortalezas de Puerto Cabello.
Previo al combate, Miguel de la Torre distribuyó sus fuerzas de manera tal que cubrieran por el oeste el camino de San Carlos, y por sur el de El Pao. La primera línea defensiva fue confiada a la Primera División dirigida por el teniente coronel Tomás García, la cual se organizó en tres batallones principales. El batallón del Valencey a cargo del teniente coronel Andrés Riesco, ocupó la parte sur del camino; a su derecha se situó el batallón ligero del Hostalrich comandado por el teniente coronel Francisco Illas, en columna de marcha detrás de las anteriores.
Además de esto, dos piezas de artillería fueron colocadas en una pequeña altura, delante de la línea formada por Valancey y Barbastro. La Posición correspondiente a la vía de El Pao fue ocupada por la División de Vanguardia liderada por el brigadier Francisco Tomás Morales, quien contaba con dos batallones principales y uno de reserva. Primero tomó posiciones el batallón ligero del Infante, a cargo del teniente coronel Simón Sicilia; e inmediatamente detrás de esta unidad se situó el batallón ligero del Príncipe.
La reserva quedó integrada por el segundo batallón del Burgos, bajo la jefatura del teniente coronel Joaquín Dalmar, quien disponía de cuatro regimientos de caballería. En cuanto al cuartel general, el mismo quedó establecido cerca del batallón Burgos.
El 15 de junio de 1821, el Libertador reorganizó el ejército republicano en tres divisiones. La primera a cargo de José Antonio Páez, y formada por los batallones Bravos de Apure (liderada por el teniente coronel Francisco Torres) y los Cazadores Británicos (al mando del coronel Thomas Ildeston Ferriar); además de 7 regimientos de caballería.
La segunda, comandada por el general de división Manuel Cedeño, y constituida por los batallones Tiradores (dirigida por el teniente coronel Ludwig Flegel), y Vargas (teniente coronel Antonio Gravete), a lo que se sumaba un escuadrón de caballería. La tercera, bajo las órdenes del coronel Ambrosio Plaza y constituida por 4 batallones.
El de Rifles a cargo del teniente coronel Arturo Sandes, Granaderos al mando del coronel Francisco Paula Vélez, Vencedor de Boyacá dirigida por el coronel Juan Uslar y Anzoátegui, comandada por el coronel José M. Arguidegui; completado todo esto por un regimiento de caballería. Las fuerzas republicanas sumaban en total 6500 hombres.
A tempranas horas del 24 de junio, desde las alturas de Buenavista, el Libertador hizo un reconocimiento de la posición realista y llegó a la conclusión de que ésta era inexpugnable por el frente y por el sur. En consecuencia, ordenó que las divisiones modificaran su marcha por la izquierda y se dirigieran al flanco derecho realista, el cual estaba descubierto; es decir, Bolívar concibió una maniobra tendiente a desbordar el ala derecha enemiga, operación ejecutada por las divisiones de Páez y Cedeño, en tanto que la división Plaza seguía por el camino hacia el centro de la posición defensiva.
Al darse cuenta la Torre de la maniobra de los republicanos, ordenó al batallón Burgos que marchase al norte a ocupar la altura hacia la cual se dirigían las divisiones de Bolívar. Al llegar el Burgos al área indicada, abrió fuego contra el batallón Bravos de Apure, cabeza de la primera división, el cual después de cruzar el riachuelo de Carabobo, trataba de escalar la pendiente que lo llevaría a la parte plana de la sabana.
Tan violento fue el contraataque del Burgos, que el Bravos de Apure tuvo que replegarse por dos veces. La situación cambió cuando una unidad que lo seguía, el batallón Cazadores Británicos, se enfrentó al Burgos y lo obligó a retroceder. Por su parte, los batallones Infante y Hostalrich, entraron en auxilio del Burgos, pero reorganizado el Bravos de Apure, se unió al Cazadores Británicos para reanudar el ataque, ayudado por dos compañías del batallón Tiradores.
Para detener el repliegue de las unidades realistas que había producido la operación patriota, Torre envió los batallones Príncipe, Barbastro e Infante, los que lograron sostener la línea de combate, pero sólo por breve tiempo, pues el grueso de la caballería de la primera división del ejército republicano entró por el norte de la sabana. Con el fin de hacer frente a este nuevo ataque, la Torre ordenó al regimiento Húsares de Fernando VII que cargase contra la caballería patriota, pero esta unidad se retiró después de disparar sus carabinas.
Finalmente, atacados de frente por la infantería y por la derecha por la caballería, los batallones realistas optaron por la retirada. Como último recurso, la Torre le ordenó al regimiento de los Lanceros del Rey que atacara a la caballería patriota, pero esta unidad no sólo desobedeció la orden, sino que huyó ante la embestida de las fuerzas republicanas.
Al entrar la batalla en su fase final, los patriotas iniciaron una tenaz persecución del ejército español, la cual fue llevada a cabo hasta Valencia. De los 4.279 efectivos que participaron en la batalla de Carabobo, los realistas perdieron dos oficiales superiores, 120 subalternos y 2.786 soldados. Por su parte, las bajas de los republicanos también fueron cuantiosas. El resto del ejército realista terminó refugiándose en Puerto Cabello.
Día del Ejército venezolano
El 24 de junio se celebra el Día del Ejército venezolano, forjadores de libertades, el cual rinde tributo a los hombres y mujeres que defienden la Patria con la vida. A partir del año 1949, por Decreto del Coronel Carlos Delgado Chalbaud, se conmemora oficialmente en Venezuela a los militares de todos los componentes. En 1958, a raíz de la caída de Marcos Pérez Jiménez, se divide las fuerzas en Ejército, Marina, la Armada, Aviación y Guardia Nacional. Fuerzas Armadas de Cooperación.
Actualmente el componente militar en Venezuela se llama Fuerza Armada Nacional Bolivariana, FANB. Los soldados de la patria cuentan con su propia Ley Orgánica. Como reseña histórica, se dice que el Ejército venezolano nace cuando lo hace la nación. Por ello, muchos toman como referencia el 19 de abril de 1810, como el día de la Independencia y de las fuerzas militares en el país.
En preámbulo para el año 1754, se establecen en Venezuela las primeras compañías militares de indios y mestizos en las provincias de Barcelona y Cumaná, que defendían la nación del ejército español. A partir de entonces, el día del Ejército está referido a todo el componente militar que lucha por la libertad y justicia, como herederos directos del Ejército Libertador de Venezuela.
Con información de Ministerio de Relaciones Exteriores