La situación de los niños migrantes ha sido objeto de preocupación y debate en todo el mundo. En un comunicado reciente, la organización de la ONU para la infancia, Unicef, resaltó la importancia de garantizar el derecho de los niños, niñas y adolescentes migrantes a solicitar asilo, ser protegidos de cualquier daño y permanecer junto a sus familias.
Unicef enfatiza que los niños y niñas migrantes son vulnerables y merecen protección y apoyo. Millones de niños y familias en América Latina se ven obligados a abandonar sus hogares debido a desastres naturales, violencia, extorsión y pobreza extrema. Estas son las causas fundamentales que impulsan la migración y el desplazamiento en la región.
La organización destaca que todos los niños y familias tienen derecho a rutas migratorias seguras ya acceder a procesos de asilo, independientemente de su nacionalidad. Además, es crucial garantizar el acceso a servicios esenciales, como atención médica, educación y medios de subsistencia, para que los niños migrantes puedan tener una vida digna y oportunidades para un futuro mejor.
En un momento de máxima tensión en la frontera sur de Estados Unidos y el fin del Título 42, que permitía expulsiones rápidas debido a la pandemia de COVID-19, el llamado de Unicef por la protección de los derechos de los niños migrantes es Urgente. Es responsabilidad de los gobiernos, incluido el de los Estados Unidos, garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y niñas migrantes, brindándoles el apoyo adecuado, acceso a servicios esenciales y oportunidades de desarrollo.
La protección de los derechos de los niños migrantes no solo es un imperativo moral, sino también un requisito legal y una inversión en el futuro de nuestra sociedad global.
