La refinería El Palito, ubicada en Venezuela, ha vuelto a operar después de superar la inactividad de su unidad de craqueo catalítico. Aunque se ha logrado un avance significativo, la producción actual representa solo una fracción de su capacidad total. En este desarrollo, se analizará la situación de la refinería El Palito, los desafíos que enfrenta y las promesas de recuperación por parte de PDVSA.
Reactivación de la refinería El Palito y su producción limitada
Según el vicepresidente de refinación de PDVSA, Gustavo Boada, la refinería El Palito ha reiniciado sus operaciones después de recuperar su unidad de craqueo catalítico. Sin embargo, la producción actual de unos 24 mil barriles diarios de combustible representa solo el 24 % de la demanda nacional de gasolina.
Boada resaltó los avances logrados por la refinería después de un año y medio de inactividad de la planta catalítica. Se menciona que se han superado barreras para producir en el centro del país, pero aún persisten desafíos operativos.
Escasez de combustible y promesas de incrementar la producción
A pesar de la reactivación, los largos tiempos de espera en las estaciones de servicio y la escasez de combustible continúan afectando a los usuarios. Boada reconoció las dificultades operativas que ha enfrentado PDVSA, pero se comprometió a hacer todo lo necesario para incrementar la producción y mejorar la situación.
Capacidad de producción y necesidad de optimización
Es importante destacar que la reactivación parcial de la refinería El Palito aún está lejos de alcanzar su capacidad máxima de producción, que es de 146 mil barriles diarios. En la actualidad, la refinería solo produce una quinta parte de su capacidad total, lo que evidencia la necesidad de seguir trabajando en su optimización.
La refinería El Palito ha reiniciado sus operaciones en Venezuela, pero su producción actual representa solo una fracción de su capacidad total. Aunque se han realizado promesas de incrementar la producción, la escasez de combustible y los largos tiempos de espera en las estaciones de servicio continúan siendo problemas persistentes. La reactivación parcial de la refinería es un paso importante, pero se requiere una mayor optimización para alcanzar su máximo potencial y satisfacer la demanda nacional de gasolina.