En un giro sorprendente, el presidente Nicolás Maduro anunció medidas para la ocupación efectiva del territorio Esequibo, en disputa desde hace más de un siglo. Estas acciones generaron tensiones, llevando a Guyana a recurrir al Consejo de Seguridad de la ONU y solicitar la intervención del Comando Sur de Estados Unidos. Este artículo explorará los detalles de las decisiones de Maduro y las respuestas de Guyana en medio de un conflicto geopolítico en desarrollo.
1. Reclamación histórica y reconocimiento internacional: Desde 1899, el territorio Esequibo ha estado en manos de Guyana, representando un desafío persistente para Venezuela. A pesar de su reconocimiento internacional como parte de Guyana, Maduro busca ejercer una soberanía plena sin detallar el proceso.
2. El Consejo Federal de Gobierno y el control militar: Maduro, en una jornada del Consejo Federal de Gobierno, designa al mayor general Alexis Rodríguez Cabello como “Autoridad Única de la Guayana Esequiba”, subrayando el control militar sobre el desarrollo integral de la región.
3. Propuesta legislativa: Creación del estado 24 de la República Bolivariana: La Asamblea Nacional, controlada por el chavismo, propondrá una ley para crear el estado 24 en el territorio Esequibo. Esta iniciativa plantea preguntas sobre la aplicación práctica y la viabilidad legal.
4. Respuesta de Guyana ante la amenaza: El presidente de Guyana, Mohamed Irfaan Alí, rechaza la intención de Maduro de “anexionarse la región del Esequibo”. La nación caribeña acude al Consejo de Seguridad de la ONU y busca la colaboración del Comando Sur de Estados Unidos para contrarrestar la amenaza.
5. Desafío a la jurisdicción internacional: El régimen chavista, tras un referendo consultivo, rechaza la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Esto desafía la orden de la CIJ y plantea interrogantes sobre la eficacia de los mecanismos internacionales en la resolución de disputas.
6. Explotación de recursos: Maduro anuncia la concesión de licencias operativas a compañías para la explotación de petróleo, gas natural y minas en el Esequibo. Sin embargo, la incertidumbre rodea la operación en un territorio controlado por Guyana y con restricciones de libre tránsito para venezolanos.
7. Medidas ambientales y cartográficas: Maduro propone una Ley Especial para declarar áreas de protección ambiental y nuevos parques nacionales en la Guayana Esequiba. También ordena la eliminación de las rayas superpuestas en el mapa oficial de Venezuela, marcadas como “Zona en Reclamación”.
8. Preparativos sociales y censales: Se anuncia el “Plan de Atención Social” para la población de la Guayana Esequiba, incluyendo un censo y emisión de cédulas de identidad. La apertura de una oficina del SAIME en Tumeremo plantea dudas sobre su operatividad en un territorio bajo control guyanés.
9. Ultimátum a Chevron y complejidades petroleras: Maduro propone una norma que prohíba la contratación de empresas que operen en las concesiones unilaterales de Guyana. Este desafío afecta a Chevron, principal socio petrolero de Venezuela, operando en el bloque Stabroeck junto a ExxonMobil y CNOOC.
10. Reflexión sobre la crisis: Ante la escalada de tensiones, Maduro afirma que “El Esequibo es nuestro”. La situación plantea desafíos significativos para la región y destaca la necesidad de una resolución pacífica y respetuosa del derecho internacional para salvaguardar la paz y la estabilidad.
En medio de declaraciones desafiantes y movimientos estratégicos, la disputa en torno al Esequibo ha alcanzado un nivel crítico. Las acciones de Maduro y las respuestas de Guyana y el Comando Sur de EEUU señalan una situación compleja que requiere diálogo y medidas diplomáticas para evitar consecuencias graves en la región. La resolución de este conflicto, marcado por décadas de reclamaciones y tensiones, sigue siendo una incógnita con implicaciones significativas para el panorama geopolítico sudamericano.
