La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) presenta un panorama desafiante para la región al cerrar el año 2023, con un crecimiento económico modesto y proyecciones aún más sombrías para el próximo año. Las economías latinoamericanas, impactadas por políticas monetarias restrictivas y un contexto económico internacional adverso, enfrentan una desaceleración que se extiende por varios años.
Cierre de 2023 y Perspectivas para 2024:
El Producto Interno Bruto (PIB) regional cerrará 2023 con un modesto crecimiento del 2,2%, según el Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe de 2023. Sin embargo, las proyecciones para 2024 señalan una disminución aún mayor, con un crecimiento estimado del 1,9%. Estas cifras revelan una persistente desaceleración que afecta la creación de empleo y la estabilidad económica.
Contexto Internacional Desfavorable:
La CEPAL destaca que el contexto económico internacional, marcado por políticas monetarias restrictivas a nivel global, ha impactado directamente en la región latinoamericana. El estancamiento del comercio mundial de bienes y las restricciones de acceso al financiamiento contribuyen a la complejidad de la situación económica.
Desafíos Endógenos y Tendencias de Décadas:
El secretario ejecutivo de la CEPAL, José Manuel Salazar-Xirinachs, enfatiza que la desaceleración económica es un problema endógeno arraigado que persiste por más de siete décadas. Entre 1951 y 1979, la región experimentó un crecimiento anual superior al 5%, pero desde 2010 hasta 2024, el promedio anual se reduce a un 1,6%. Esta tendencia refleja un desafío estructural.
Impacto de la Política Monetaria Global:
Las tasas de interés elevadas implementadas por los países desarrollados, como Estados Unidos, para contener la inflación, han restringido el acceso al financiamiento y enfriado las economías latinoamericanas. Este escenario externo desfavorable se traduce en dificultades persistentes para acceder a recursos financieros durante el próximo año.
Variabilidad en el Desempeño Regional:
Las cifras regionales revelan que, al cierre de 2023, todas las subregiones latinoamericanas experimentarán una disminución en el crecimiento respecto a 2022. América del Sur, Centroamérica y México, así como el Caribe, mostrarán tasas de crecimiento más bajas. Argentina y Haití enfrentan crecimiento negativo en 2023, pero se proyecta una mejora para 2024.
Heterogeneidad en el Desempeño Nacional:
Dentro de la región, se observa una diversidad de desempeños nacionales. Panamá lidera con un crecimiento del 6,1% en 2023, seguido por Costa Rica con un 4,9%. En contraste, Argentina y Haití presentan crecimiento negativo en 2023, pero se espera una ligera recuperación para 2024. Brasil, Colombia y México experimentan variaciones en sus tasas de crecimiento.
Ocupación y Crecimiento del Empleo:
La ocupación muestra un crecimiento del 1,4% al cerrar 2023, reduciéndose respecto al 5,4% de 2022. Las proyecciones para 2024 sugieren una continua desaceleración, con un crecimiento estimado del empleo de apenas el 1%. Esta tendencia revela un desafío adicional en el ámbito laboral.
Inflación y Desafíos en la Política Monetaria:
Aunque la inflación ha disminuido en gran parte de los países, las tasas de interés siguen sin reducirse. Se anticipan dificultades persistentes en el acceso al financiamiento en 2024. La variabilidad en los objetivos inflacionarios de los países, evidenciada por casos como Brasil, Chile, Paraguay y Perú, complica aún más el panorama económico.
La desaceleración económica en América Latina, agravada por factores internos y externos, plantea desafíos significativos para la región. La heterogeneidad en los desempeños nacionales y la variabilidad en la inflación y la política monetaria requieren respuestas estratégicas y coordinadas. En este contexto, es esencial buscar soluciones innovadoras y promover políticas que impulsen un crecimiento sostenible, protejan el empleo y mitiguen los impactos adversos en la población.