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Economía

Remuneraciones privadas en alza, públicas en descenso

El primer trimestre de 2024 ha marcado una divergencia notable en las tendencias salariales en Venezuela, según revela el informe del Observatorio Venezolano de Finanzas. Mientras que las remuneraciones en el sector privado experimentaron un crecimiento significativo, las del sector público sufrieron una contracción preocupante.

Crecimiento en el sector privado

El análisis del Observatorio Venezolano de Finanzas muestra un panorama alentador para el sector privado en el Área Metropolitana de Caracas.

Las remuneraciones en este sector, particularmente en el comercio y los servicios, registraron un incremento notable durante el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior. El aumento promedio alcanzó un impresionante 59%.

Estancamiento en el sector público

Por otro lado, el sector público ha enfrentado desafíos significativos en materia salarial. Desde marzo de 2023, los salarios en el sector público se han mantenido congelados, lo que ha generado preocupación entre los empleados.

Aunque se han otorgado algunos bonos adicionales, la falta de ajustes salariales significativos ha dejado a los trabajadores con un poder adquisitivo estancado.

Disparidad regional

El análisis del Observatorio de Finanzas también revela una disparidad notable en las remuneraciones según la región.

Mientras que en algunas áreas como Zulia se registraron remuneraciones relativamente más altas, en otras como Anzoátegui los salarios promedio mensuales fueron considerablemente más bajos. Esta disparidad refleja desafíos estructurales en la distribución equitativa de los recursos económicos en el país.

Perspectivas Salariales y Recomendaciones

Ante este panorama, es fundamental que las autoridades tomen medidas para abordar la brecha salarial entre el sector público y privado, así como entre diferentes regiones del país. Se necesitan políticas que promuevan un aumento sostenible de los salarios en todos los sectores, no solo en bonos, sino como salarios integrales, garantizando así una distribución más equitativa de la riqueza y el bienestar económico para todos los trabajadores venezolanos.