Un hecho impactante sacudió a la comunidad del municipio Simón Bolívar en el estado Anzoátegui, cuando la policía detuvo a un hombre que intentaba vender a su propia hija de cinco años por tres mil dólares. La intervención policial también llevó al arresto de una mujer que actuaba como intermediaria en esta transacción ilegal.
Detalles del operativo policial
Los detenidos, Sir Walter Gómez Serrano, de 49 años, y Adriana Carolina Astudillo Cárima, de 35 años, fueron arrestados gracias a un operativo de vigilancia y patrullaje llevado a cabo en el Bulevar 5 de Julio, en la intersección con la calle Juncal. La operación fue dirigida por el Servicio de Vigilancia y Patrullaje de Poli Simón Bolívar.
El director presidente de Poli Simón Bolívar, José Ferrer, explicó que los agentes notaron el comportamiento nervioso de la mujer mientras caminaba con la niña. Esta actitud levantó sospechas, lo que llevó a los oficiales a interceptar a Astudillo. Al ser abordada, la mujer se negó a proporcionar información sobre la menor, incrementando aún más las dudas de los agentes.
Evidencia y confesión
Durante la inspección, los policías encontraron un teléfono celular y dos pasaportes entre las pertenencias de Astudillo.
Uno de los pasaportes contenía sus datos, mientras que el otro correspondía a una menor de edad diferente a la que la acompañaba. Ante la presión de los oficiales, la mujer confesó que había recibido instrucciones del padre de la niña para venderla en Maturín, Anzoátegui, por tres mil dólares.
Acción inmediata
Tras la confesión, los funcionarios contactaron al Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente (CPNNA) y procedieron a localizar al padre de la menor.
La policía detuvo a Sir Walter Gómez Serrano en su domicilio en el barrio Fernández Padilla, poniendo fin a este intento de transacción ilegal.
Los dos detenidos quedaron a disposición del Ministerio Público, enfrentando cargos graves por trata de personas y otros delitos relacionados. Mientras tanto, la niña fue puesta bajo la tutela del CPNNA, asegurando su protección y bienestar inmediato.
Este caso ha generado una fuerte conmoción en la comunidad y ha puesto de relieve la vulnerabilidad de los menores ante situaciones de explotación y abuso. La rápida actuación de los agentes de Poli Simón Bolívar evitó un desenlace trágico y subraya la importancia de la vigilancia y el patrullaje preventivo en la protección de los derechos de los niños.
Este lamentable incidente destaca la urgente necesidad de reforzar las medidas de protección infantil y de sensibilizar a la sociedad sobre los peligros de la trata de personas. Es fundamental que las autoridades intensifiquen los esfuerzos de vigilancia y fortalezcan las redes de protección social para prevenir casos similares. Además, se recomienda a los ciudadanos mantenerse vigilantes y reportar cualquier comportamiento sospechoso que pueda poner en riesgo la integridad de los menores. La colaboración entre la comunidad y las fuerzas de seguridad es esencial para garantizar un entorno seguro y proteger a los más vulnerables de nuestra sociedad.
