En los primeros siete días de agosto de 2024, el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), a través de su Observatorio Digital de Femicidios, ha reportado cuatro femicidios consumados en Venezuela. Esta alarmante cifra refleja un incremento en la frecuencia de estos crímenes, que ya superan las estadísticas registradas en el mismo periodo del mes anterior. La realidad es preocupante: en solo una semana, hubo un femicidio cada 42 horas, dejando en evidencia la urgente necesidad de tomar medidas para enfrentar esta crisis.
Comparativa de femicidios con periodos anteriores
El aumento en la cantidad de femicidios durante los primeros días de agosto resalta un patrón de violencia de género que va en ascenso en Venezuela. Durante la primera semana de julio, Cepaz había documentado tres casos de femicidio, con una frecuencia de una acción femicida cada 56 horas.
El incremento de la violencia en apenas un mes es notorio, y pone de manifiesto la gravedad del problema que enfrenta la sociedad venezolana. Este fenómeno no es aislado, sino parte de una tendencia más amplia que abarca todo el año.
Situación en lo que va del año
Entre enero y abril de 2024, el mismo observatorio de Cepaz contabilizó un total de 58 femicidios consumados y 27 intentos fallidos. Esta estadística se traduce en un acto de violencia letal contra las mujeres cada 33 horas, una realidad que ha dejado profundas cicatrices en la sociedad.
Las entidades con mayores incidencias fueron Miranda, Zulia y el Distrito Capital, lo que sugiere que la violencia de género se concentra en áreas urbanas densamente pobladas. En este periodo, además, 30 niños y adolescentes quedaron huérfanos, lo que añade una dimensión adicional de tragedia al problema.
Dinámicas de violencia y factores asociados a los femicidios
Los datos revelados por Cepaz muestran que la mayoría de las víctimas y sus agresores eran de nacionalidad venezolana, y que en más del 65% de los casos, la víctima conocía a su agresor. Este dato es crucial, ya que refleja un patrón de violencia intrafamiliar o de proximidad que agrava la vulnerabilidad de las mujeres en el entorno doméstico.
Las armas blancas y los golpes se destacan como los métodos más utilizados en la perpetración de estos crímenes, lo que sugiere una violencia física directa e intencional.
Necesidad de estadísticas confiables y políticas públicas
Cepaz ha subrayado la importancia de contar con estadísticas oficiales y accesibles que permitan comprender la magnitud real del problema de los femicidios en Venezuela. La organización resalta la ausencia de una base de datos nacional que incluya no solo el número de víctimas, sino también las causas específicas y los contextos asociados a estos crímenes. Sin datos confiables, la elaboración de políticas públicas efectivas se ve severamente limitada, lo que perpetúa la falta de prevención y de medidas de protección adecuadas para las mujeres.
La situación de los femicidios en Venezuela es crítica y requiere una respuesta inmediata por parte del Estado y la sociedad. El aumento en el número de casos en lo que va de 2024, y en particular durante el mes de agosto, es un llamado de atención que no puede ser ignorado. Es indispensable que se implementen políticas públicas efectivas, basadas en datos precisos y accesibles, para proteger a las mujeres y prevenir más tragedias en el futuro.
