Una trágica electrocución en el sector Santa Lucía de Maracaibo dejó como saldo la muerte de Mercedes Josefina Amaya Ríos, de 62 años, y dos mascotas. El incidente ocurrió el sábado 7 de septiembre, cuando un cable eléctrico de alta tensión se desprendió durante un aguacero torrencial, afectando tres viviendas y causando un fatal accidente que conmocionó a la comunidad local.
El desastre eléctrico
El aguacero que azotó Santa Lucía el pasado sábado desencadenó un desastre inesperado cuando un cable de alta tensión se desprendió y cayó sobre varias casas en la calle La Múcura. La fuerte tormenta provocó que el cable quedara en contacto con las estructuras, electrificando tres viviendas cercanas.
En el interior de una de las casas afectadas, Mercedes Josefina Amaya Ríos se encontraba en la cocina junto a su hermana, Yolanda Amaya, preparando café. La situación se tornó dramática cuando la mujer notó que uno de sus gatos estaba tendido en el suelo del anexo de la vivienda, aparentemente afectado por la descarga eléctrica. Para rescatar al animal, Mercedes subió una escalera de metal, que al tocar el cable electrificado, le causó una descarga mortal.
La muerte inmediata
El impacto de la descarga eléctrica fue fatal para Amaya Ríos, quien falleció al instante junto con su mascota. Además, un perro que se encontraba en una casa adyacente también pereció debido a la electrificación. La rápida intervención de los bomberos no pudo salvar a la sexagenaria, ya que la muerte fue instantánea.
Yolanda Amaya relató a las autoridades que su hermana no emitió ningún sonido o grito al momento de recibir la descarga. Alarmada por la ausencia prolongada de Mercedes, salió a buscarla bajo la lluvia y encontró a su hermana sin vida junto al gato. La tragedia también afectó a los residentes locales, que presencian una vez más las consecuencias de las lluvias intensas en la región.
Recomendaciones médicas y reacciones comunitarias
Los médicos forenses que realizaron la autopsia de Mercedes Josefina Amaya Ríos encontraron que la descarga eléctrica había causado un daño severo a sus órganos internos. Las recomendaciones para su sepultura fueron urgentes debido a la gravedad de las lesiones.
La comunidad de la calle La Múcura expresó su descontento con las condiciones de seguridad eléctrica y la recurrente inundación durante las lluvias intensas. Los vecinos señalaron que el aguacero causó no solo daños materiales, sino también grandes dificultades para las personas de edad avanzada que deben transitar entre el agua. La caída del cable se consideró un “milagro” por no haber causado más víctimas fatales, resaltando la fragilidad de la infraestructura en la zona.
El trágico accidente en Santa Lucía pone de relieve la necesidad urgente de revisar y mejorar las infraestructuras eléctricas y de drenaje en Maracaibo. La pérdida de Mercedes Josefina Amaya Ríos y sus mascotas subraya la vulnerabilidad de las comunidades ante fenómenos naturales y fallas en el suministro de servicios básicos. La tragedia ha conmovido a los vecinos y destaca la importancia de medidas preventivas para evitar futuros accidentes y proteger a los residentes de situaciones similares.