Según un reporte de Reuters, Chevron y firmas europeas presionan para mantener participación en empresas petroleras de Venezuela, en medio del nuevo escenario de sanciones impuestas por Estados Unidos al sector energético venezolano. Las compañías están solicitando autorizaciones específicas a la administración estadounidense para evitar el abandono forzoso de sus activos en el país.
Las gestiones comenzaron tras la decisión de Washington en marzo de revocar licencias previamente otorgadas a socios y clientes extranjeros de Petróleos de Venezuela (PDVSA). Estas licencias permitían realizar operaciones petroleras, incluidas exportaciones hacia destinos como Estados Unidos, Europa e India.
Chevron y firmas europeas presionan a EE. UU. ante nuevas sanciones petroleras en Venezuela
El gobierno estadounidense dio plazo hasta el 27 de mayo para culminar cualquier transacción, sin especificar qué hacer con el personal y la infraestructura en territorio venezolano. Esto ha generado un clima de incertidumbre entre las compañías extranjeras que operan en el país, especialmente sobre sus participaciones en empresas mixtas con PDVSA.
Fuentes cercanas indicaron que la estadounidense Chevron y varias firmas europeas están buscando definiciones claras para evitar el desmantelamiento de sus operaciones o la pérdida de activos estratégicos. La presión se intensificó luego de que PDVSA cancelara cargamentos de crudo a Chevron debido a dudas sobre los métodos de pago.
Empresas exigen claridad sobre licencias para mantener operaciones petroleras en Venezuela
Expertos legales y representantes del sector energético aseguran que, sin directrices específicas por parte del Departamento del Tesoro, las empresas enfrentan el riesgo de violar las sanciones si mantienen operaciones, o perderlo todo si se retiran.
Además, la semana pasada expiró una licencia adicional que permitía a empresas de servicios petroleros estadounidenses conservar equipos en el país, lo que limita aún más la operatividad en los campos venezolanos.
La postura final del gobierno de Estados Unidos podría marcar un punto de inflexión en la presencia internacional dentro de la industria petrolera venezolana.
Por Reuters