Las mujeres necesitan mayor cantidad de hierro que los hombres, sobre todo en la edad fértil porque pierden gran cantidad de sangre durante la menstruación. La fatiga y dolores de cabeza son percibidos por las féminas como padecimientos propios del estrés y no como un problema de salud.
Algunos síntomas con los cuales se puede detectar la falta de hierro en el organismo son agotamiento, cansancio, caída del cabello, falta de aire, palidez, sangrado excesivo en la menstruación y ansiedad.
La anemia puede desencadenar partos prematuros o infertilidad. Existen varios tipos de anemia, pero el más común es la anemia por déficit de hierro o de folatos (ácido fólico). Sin embargo, la anemia también puede ser inducida por problemas renales. 
Para combatir esta patología, los especialistas recomiendan ingerir alimentos enriquecidos con hierro como la espinaca, la alcachofa, el brócoli y legumbres. Asimismo, la carne de res, pollo, pescado e hígado.
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