El número muertos por el ataque terrorista perpetrado la tarde del martes, en la Redacción de la revista Charlie Hebdo, en París, se elevó a doce.
Cerca de las dos de la tarde, las autoridades policiales parecían tener acorralados a los terroristas que entraron a las oficinas de la empresa editora y dispararon contra el personal y visitantes.
Disparos aislados y movimiento policial podía verificarse a través de la transmisión televisiva, gracias a cámaras y micrófonos instalados en las azoteas de los edificios cercanos a la escena del crimen.
El presidente de Francia, Francois Holande, se acercó al sitio del suceso y declaró que su Gobierno no descansará hasta dar con los terroristas y desmantelar al grupo que perpetró el ataque.
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