Un ciudadano identificado como Jorge Avein Castillo Rengel, presuntamente cristiano evangélico, ha sido detenido por la Policía Municipal de Maturín, acusado de abusar sexualmente de una vecina. El hombre habría ingresado a la vivienda de la víctima y la habría drogado antes de cometer el acto. Este trágico incidente ha generado conmoción en la comunidad, especialmente en la iglesia a la que ambos pertenecían.
El acusado, Jorge Avein Castillo Rengel, de 40 años, habría ingresado a la casa de su vecina, una mujer también evangélica, en la calle Colinas del Sur del sector El Psiquiátrico en Maturín. Según los informes, el agresor drogó a la víctima con un polvo de color marrón y luego abusó sexualmente de ella.
La mujer, de 50 años, denunció el hecho en la oficina de Violencia contra la Mujer de la Policía Municipal. Según su relato, el agresor subió al techo de su casa y, al pedirle que se bajara, este hizo caso omiso y entró a la sala de la vivienda.
Después de rociar el polvo en su brazo, la mujer perdió el conocimiento y al despertar al día siguiente, experimentó dolor y humedad en sus partes íntimas. Además, afirmó que esto no había sido la primera vez que ocurrió.
La víctima también mencionó que en otras ocasiones el agresor había robado comida y pertenencias de su hogar. Tras recibir la denuncia, las autoridades se dirigieron al sector y detuvieron al presunto agresor.
Exámenes médicos forenses confirmaron el acto de violencia sexual, respaldando la denuncia de la víctima. El detenido ahora enfrenta cargos por abuso sexual y el caso está siendo llevado por el fiscal 18vo. del Ministerio Público, Itamar Martínez.
El caso del ciudadano evangélico acusado de violar a una hermana de la Iglesia en su vivienda ha dejado una profunda conmoción en la comunidad religiosa y en la sociedad en general. Este incidente representa una trágica violación de confianza y vulnerabilidad dentro de un entorno religioso. Las autoridades competentes están llevando a cabo las investigaciones pertinentes y se espera que se haga justicia para la víctima.
Es fundamental que se brinde apoyo y protección a las víctimas de abuso sexual, sin importar su afiliación religiosa, y que se promueva un ambiente seguro y respetuoso para todos los miembros de la sociedad.