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Tragedia en Perú: Sicarios acaban con la vida de dos hermanos venezolanos

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La noche del martes, en la urbanización Paraíso Florido, San Martín de Porres (SMP) en Lima norte, se produjo un trágico incidente en el que los hermanos Alvis Josué y John Alvis Leguet Lugo, dos venezolanos, fueron asesinados a tiros por sicarios. Este artículo profundiza en el incidente, brindando detalles y explorando las posibles causas de esta violenta tragedia.

Un Atentado Mortal:

Hermanos Asesinados a Sangre Fría: Uno de los hermanos perdió la vida instantáneamente, mientras que el otro, herido, intentó huir antes de sucumbir a las heridas causadas por disparos de arma de fuego. Este atentado se llevó a cabo cuando ambos viajaban en un Mototaxi MT-26 rojo que ondeaba una pequeña bandera de Venezuela en su costado.

Posible Ajuste de Cuentas: Según testigos presenciales, los autores del ataque eran dos individuos que llegaron y huyeron en un vehículo blanco. Estas circunstancias han llevado a las autoridades policiales a considerar que se trata de un doble asesinato con indicios de ser un ajuste de cuentas, dado que la zona en la que ocurrió es conocida por su alta criminalidad.

Ecos de Violencia: Testigos cercanos al incidente informan haber escuchado cerca de 15 detonaciones, lo que subraya la violencia y la audacia de los perpetradores. Este aterrador suceso ha sacudido a la comunidad y ha planteado preguntas sobre la seguridad en la zona.

Antecedentes de las Víctimas:

Los hermanos Leguet Lugo habían emigrado a Perú desde Venezuela. Antes de su mudanza, residían en el sector La Chinita Arriba, Punto Fijo, estado Falcón. La noticia de su trágica muerte ha causado conmoción tanto en Perú como entre la comunidad venezolana en el extranjero.

Este lamentable incidente subraya la importancia de abordar la violencia en ciertas zonas de Lima norte y la necesidad de reforzar la seguridad en estas áreas. Además, es vital que las autoridades investiguen este caso en profundidad para llevar a los responsables ante la justicia y prevenir futuros actos de violencia. La comunidad debe unirse en repudio a la violencia y trabajar juntos para promover un entorno más seguro y pacífico.

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